En ocasiones me pierdo en un pantano de ideas. Ideas triviales, ideas huecas; Ideas maravillosas, ideas rebosantes.
Me pierdo al punto de no poder encontrarme, de perder el sentido de la realidad, de lo que me rodea ,y enrolarme en una espiral de colores y sombras, de perfumes y pestes, de sueños y pesadillas.
Aquí estamos ambos. Separados por un monitor y kilómetros de distancia.
Y en tu mente seguramente cruzara la idea... "¿Y este loco quien será?".
Bueno, soy tu.
Soy "Tu" en tus ratos de ocio, donde nada parece llenarte, donde las cosas giran y se detienen y no te causan la menor importancia. Donde las ideas te abordan, te inflan y te explotan.
Solo hay una diferencia.
Escribo a detalle el simple sentir de la idea, no la idea en sí.
¿Por que?, porque las sensaciones son mas interesantes que las razones. Hay miles de razones para llorar o ser feliz, pero hay millones de formas de llorar y ser feliz, con peculiaridades tan minúsculas que solo pueden ser vistas bajo la lupa. Y son esos pequeños detalles son los que dan forma al sentimiento.
Así pues, decenas de palabras y quizá cientos de letras no digan nada en sí, pero en realidad lo envuelven todo.
No importa el nombre, etiqueta o clasificación; solo lo que envuelve, lo que significa:
lo que provoca.
