Nereael
Hola, Ainoa. Me ha gustado este relato desde la perspectiva de las pequeñas hormigas. Y la reflexión de los humanos atados a sus trabajos, a sus cosas, siempre trajinando, como las hormigas. Gracias a Dios, yo siempre me sentí un poquito más cigarra que hormiga. Jeje.
24/06/12 06:06