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Alma Indomable

Alma indomable

Capítulo 1

Un alma indomable

Miami es una hermosa ciudad, unas de las tantas ciudades que pertenecen a los Estados Unidos de América se destacan por sus grandes edificios y por sus playas pero también puede ocultar pequeños secretos como la corrupción, la discriminación, la lucha por el poder la prostitución, la violencia entre otras pero la más poderosa y la más ruin es la mafia. La mafia en estos tiempos es la que tiene poder, dinero y autoridad dentro de un gran estado, hoy en día se encuentran innumerable mafias procedentes de diversos lugares, una de las más importante e influyentes era la Asociación llamada TTPK esta organización tenía muchas funciones en la ciudad no solo tenía tratos con la mafia también se encargaba de proteger a sus clientes, asesinar a los enemigos de sus clientes, contrabando y misiones especiales. La TTPK no era como las demás asociaciones, esta tenía un lema muy estricto “si eres parte de esta familia debes ser fiel y obediente sino estas muerto”. Su representante se llamaba Claus era un anciano de unos 75 años, todo su vida había vivido de y para la TTPK, amaba la organización era su vida él era quien decidía quien entraba en ella y quien salía, todo el mundo de la mafia lo conocían, era un hombre hecho y derecho que se hacía respetar por todos. Su mano derecha era una mujer muy joven de edad (22) pero por su carácter aparentaba tener más años porque se comportaba como una mujer madura, se llamaba Rebeca pero se la conocía como la generala o cara cortada por la simple razón de que ella había estado en el ejército y fue la jefa de un grupo revolucionario de Cuba, en plena revolución de Cuba ella y sus integrantes fueron capturados y torturados con el fin de obligarles a aceptar unas reformas corruptas y autoritarias pero ella nunca accedió y por eso como pago ellos le dejaron esa gran cicatriz en la cara, finalmente ella pudo escapar gracias a Claus y desde ese momento ella se convirtió en su mano derecha y en su fiel servidora.
La TTPK contaba con numerosos integrantes en los Estados Unidos como en el extranjero, una de sus integrantes era una joven mujer hispana de piel morena, alta, delgada y con un físico muy bien cuidado. Todos le llamaban la mujer de la débil sonrisa, nadie sabía cómo se llamaba, se había ganado ese apodo porque casi nunca sonreía, era una mujer muy temida no le tenía miedo a nada ni a nadie, cuando le mandaban a una misión no rechistaba solo lo hacía sin decir nada solamente obedecía las ordenes de Claus de nadie más, él era el único quien podía tener autoridad sobre ella y además Claus era el único que sabía su verdadero nombre.
Era sábado por la noche en Miami los clubs nocturnos de la ciudad estaban repletos de gentes que venían a bailar y a olvidarse de sus trabajos o simplemente venían a divertirse, el club más conocido y visitado era el “Night” en ese club abundaba el alcohol y la prostitución de alta categoría que solo las personas ricas se lo podían permitir las persona que más lo visitaban eran empresarios, mafiosos, petroleros…. personas que no les importaba malgastar el dinero en estos tipos de vicios. En un rincón del recinto se encontraban hablando dos hombres, uno parecía ser más mayor que el otro…
- Para cuando tendré lo que te pedí –mencionó el más viejo mientras se terminaba su bebida.
- Para mañana lo tendrá no se preocupe por eso lo tengo todo controlado – mencionó el joven que trataba de calmar al hombre que tenía a su lado.
- Eso espero sino…. Tú ya sabes lo que te pasará
- No se preocupe más por eso le doy mi palabra que…
- Tú palabra dices… jajajajajaj, no me hagas reír, mi mierda creo que vale más que tu palabra, jajajjaja- el hombre cogió las llaves de su coche y desapareció dentro de tanta multitud.
- Maldito…. Marta sírveme otra copa rápido- mencionó el joven mirando a la camarera del bar.
- Claro cariño, pero tienes que esperar un momentito que la chica que tienes a tu lado iba primero- la camarera señala a una joven que estaba sentada a su lado.
- QUEEEEEEE, pero quién crees que te está pagando aquí perra, sírveme a mi primero que traigo un cabreo.
- Si claro ahora mismo, querida podrías esperar un momento- menciona la camarera a la chica que estaba sentada esperando su copa.
- Ya veo que tengo que esperar que le sirvas a este cerdo verdad?- el joven que estaba sentado al lado de la chica se levanta al escuchar lo que la joven acabó de decir.
- Pero quien mierda te crees tú puta perra de mierda para hablarme así? – el joven se levanta y le coge del brazo.
- Y tú cerdo a quién crees que estas tocando? – la joven se levanta.
- Serás puta…- el joven sacó una navaja de su bolsillo y se lo apunto a la joven.
- Que vas a hacer con eso? Te vas a limar lass uñas? – la joven se le acerca.
- Que no es obvio putita te voy a rajar tu carita si me sigues tratando de esa manera, acaso no tienes miedo?- el joven se le acerca a ella y le rosa la navaja por el rostro de la joven.
- Miedo dices? – la joven agarra los testículos del joven y los aprieta.
- AAAAAAAAAAAAAAAA!!!!!- pega un grito el joven.
- Que me vas a hacer que….. – la joven apretaba cada vez más.
- Putaaaaaaaaaaaaaaa sueltameeeee me haces dañooooooooo – no paraba de gritar el joven.
- Suelta la navaja ahora mismo si no quieres ver a tus pelotas rodar por el piso.
- Putaaaaaa sueltameeeee
- Ya veo que tu vocabulario es pésimo, bien entonces, despídete de tus pelotas – la mujer estuvo a punto de estirparle sus testículos pero algo impidió que la mujer le ocasionara esa desgracia al muchacho.
- Ya es suficiente, no hemos venido aquí a perder el tiempo, a esta escoria le espera una dolorosa muerte si no coopera con nosotros – mencionó un joven que estaba parado detrás de la joven que sujetaba los testículos del otro.
- Tienes razón, esta mierda se merece algo más- la mujer le suelta y le agarra del pelo y lo hace arrodillar- ahora escucha muy bien lo que te va a decir mi compañero.
- AAAAAAAAAAA!!! Ustedes quienes son que quieren…..
- En donde esta Roberto Montero? – menciona el recién aparecido.
- El jefe? Para que lo buscan
- Eso no es de tu incumbencia solo coopera y dinos donde está?- mencionó la joven
- Me buscaban?- de repente apareció Roberto Montero acompañado de tres guardaespaldas .
- Somos de la TTPK – menciono el chico que estaba con la joven.
- De la TTPK?- el tal Montero se puso de lo más nervioso al escuchar TTPK.
- Solo veníamos a decirle que ya nos hemos ocupado de su encargo- mencionó la joven y acto seguido soltó el cabello del otro joven que la estaba incordiando.
- De verdad, gracias muchísimas gracias- Montero se puso muy contento- si alguno de mis muchachos los estaba molestando o insultando les pido mil disculpas mis hombres se encargaran de castigarles.
- Pero jefe por favor…
- Llévenselo y denle una paliza- mencionó Montero señalando al joven que hace poco estaba insultando a la chica.
- Bueno nosotros nos retiramos ya hemos cumplidos- mencionó la joven.
- Gracias y disculpen las molestias serán bien recibidos la próxima vez que vuelvan- mencionó Montero con una gran sonrisa en su boca.
- No creo que vuelva a pisar este sitio, porque la próxima vez que vea a esa escoria mal hablada no me contendré y le arrancare no solo sus pelotas también le arrancare lo que tiene al lado de sus pelotas- mencionó la joven que acto seguido cogió su chaqueta y salió del lugar.
- Perdone a mi compañera ella está un poco agotada no sabe lo que dice.
- Ella es la “mujer de la débil sonrisa” verdad?- mencionó Montero
- Quién sabe? Si me disculpa- el joven que venía con la chica cogió su chaqueta y salió a buscar a su compañera.
- No hay duda es ella, estoy seguro- mencionó Montero en voz alta.
- De qué habla jefe?
- De nada vamos a mi despacho que tengo mucho trabajo pendiente.
- Y que hacemos con la escoria que estuvo molestando a sus esos tipos que tuvieron aquí.
- A ese imbécil no le quiero volver a ver, desaparécelo, no quiero pensar que hubiera pasado si ese imbécil no hubiera cerrado el pico, esa mujer lo habría matado y el nombre de mi negocio estaría en serios problemas – menciono Montero.
- Como diga jefe, lo mandaremos al otro mundo.
Las calles de Miami estaban repletas de gente y era fácil perderse, mientras tanto una joven mujer hispana caminaba muy acelerada hacia una moto que estaba estacionada en un estacionamiento cerca del club “Night”.
- Esperameeeeee
- Estoy molesta!!- mencionó la joven
- Uffffffff cuanto me hiciste correr “Debi”.
- Eres uno de los pocos que me puede llamar de esa manera, ahora si me permites tengo cosas que hacer- menciona la joven subiéndose a la moto estacionada.
- Y entonces como quieres que te llame si ni siquiera se tu nombre, es más nadie lo sabe y la verdad no me parece nada educado llamarte “la mujer de la débil sonrisa”.
- Entonces llámame como quieras “Arturo Montesinos”- la mujer hace un gesto sarcástico y se pone el casco y enciende la moto.
- Vaya por Dios es la primera vez que me llamas por mi nombre completo, debes estar muy enfadada huyyyy perdóneme señorita – Arturo era como se llamaba su compañero.
- Déjate de bromas hoy no estoy para eso, nos vemos mañana- la mujer se dispuso a irse cuando Arturo cogió su mano y le dijo.
- Antes de venir Claus me dijo que nos quiere ver a los dos mañana a primera hora de la mañana- la mujer no dijo nada y salió a toda prisa del aparcadero.
- Me pregunto porque Debi será de esa manera, tan reservada – se pregunto a si mismo Arturo mientras abría la puerta de su coche para irse.
Ya era casi de madrugada eran casi las 4 de la mañana, ya era domingo las calles a esas horas estaban silenciosas y calmadas solo se escuchaba el sonido del motor de una moto que corría a toda velocidad, era Debi que había pasado la noche dando vueltas con su moto en vez de ir a descansar a su departamento, una hora después la joven llegó a un edificio muy amplio, grande y muy bien vigilado, no tuvo inconvenientes para entrar es mas parecía que todos en ese lugar la conocían.
- Muy buenos días señorita - le dijo a Debi una mujer que parecía ser la recepcionista de ese lugar.
- Buenos días ya llegó Claus- mencionó la joven con una cara molesta.
- Si por supuesto la está esperando en su despacho.
- Bien gracias- la joven caminó hacia el despacho del hombre que la estaba esperando.
El edificio era grande y lujoso tenía más de 50 pisos y estaba muy bien vigilado, todo el edificio estaba diseñado con la tecnología más avanzada. Después de unos cuantos minutos la joven pudo llegar a su destino y antes de entrar golpeó la puerta.
- Buenos días….. o quise decir que son malos días?- menciono un anciano que estaba parado en medio de su gran despacho con una copa de vino en la mano
- De buenos días nada Claus, tú ya sabes porque estoy así no te hagas el sorprendido- menciono la joven cerrando la puerta.
- Sabía que te ibas aponer de esa manera, pero es por tu bien, no puedo dejar que solamente tú te ocupes de misiones peligrosas y por cierto ¿Dónde está Arturo?
- Odio que me envíes a hacer recaditos a memos como el tal Roberto Montero y de Arturo no sé nada desde ayer por la noche- mencionó enfadada la joven dirigiéndose al bar del gran despacho.
- No deberías beber a estas horas de la mañana Lizeth no es bueno para tu salud – “Lizeth” era el verdadero nombre de Debi solamente Claus lo sabia nadie más.
- Mira quién fue a hablar y tú que estás haciendo tomando café? Jajajja- menciono la joven.
- De mi no te preocupes yo ya estoy muy viejo para preocuparme de mi salud en cambio tú eres joven y además tienes que estar sobria para esta noche- mencionó Claus acabándose de beber el vino que contenía su copa.
- De que estás hablando?- la joven fue interrumpida por la presencia de un joven que estaba un poco desaliñado.
- Arturo cuantas veces tengo que decirte que toques la puerta y mírate como estas con la misma ropa de ayer y hueles a alcohol- mencionó la joven al ver a su compañero con cara de resaca.
- Primero, es el jefe quien tiene que darme toda la charla que me estás dando tú, segundo ya estoy aquí- mencionó Arturo a Claus.
- Está bien ya no pelen escuchen bien lo que les voy a decir. Esta noche habrá una fiesta en casa del señor “Charles Brown”, como ustedes ya saben ese hombre es uno de los ricos más conocido de de los Estados Unidos y esta noche se celebrará el aniversario de él y el de su esposa y me ha invitado ya que es un buen amigo mío.
- Todo eso me parece bien pero que tiene que ver con nosotros?- mencionó la joven.
- A eso iba, lo que quiero es que ustedes dos me acompañen a la fiesta tú Arturo como mi guarda espalda y tú querida como mi acompañante- menciono Claus.
- Pero si a esas fiestas solo va gente rica y pijos yo no pinto nada allí, Claus podrías pedir a otra que te acompañe yo…- le joven no tenías ganas ni ánimos de ir a esa fiesta porque odiaba a la gente que se creía más que otros.
- Lo siento pequeña pero me acompañaras quieras o no, Arturo puedes ir a descansar porque esta noche será agotadora y tu querida usaras este vestido- Claus señaló un paquete en donde se podía imaginar que estaría el vestido que usaría la joven para esta noche.
- Maldita sea Claus si no fuera porque tú me lo pides…- la joven agarra el paquete y se encamina hacia la puerta.
- La fiesta será a las 22:00 pm no lo olviden, a las 21:30pm Arturo te irá a recoger espero que este lista a esa hora querida.- mencionó Claus mirando por la ventana.
- Si claro…- la mujer solo dijo eso y salió de nuevo a toda prisa sin decir nada ni despedirse.
- Jefe a mi no me engaña –mencionó Arturo-porque hace que vaya Debi también? bien podría ir Rebeca.
- Sabía que no te podía engañar Arturo, mi amigo me pidió que la llevara, para conocer a la mujer de la débil sonrisa.
- Ya veo que Debi es muy popular- mencionó Arturo.
- Y con razón todo el mundo que habla de ella la ven como una maquina asesina una persona sin corazón, un alma indomable que solo cumple su cometido en la tierra que es MATAR Y ANIQUILAR SIN COMPASION, eso es lo que piensan de ella.
- Pero ella no aparenta ser una mujer despiadada según mi opinión jefe- menciono Arturo preocupado por lo que acabo de escuchar.
- A veces las apariencias engañan mi querido amigo yo la conozco muy bien y sé que se está controlando y está cumpliendo con lo que me prometió.
- Y que es lo que ella le prometió jefe?
- Yo la conocí cuando ella tenía 16 años, solo era una niña que había escapado de su casa, recuerdo que en ese tiempo era invierno y estaba nevando mucho y la encontré debajo de un puente llorando, me acerque a ella y le ofreció hospedaje en mi casa, me explico que no tenía a donde ir y que no quería volver a su casa porque allí era muy infeliz así que me convenció y acabe por aceptarla en mi casa. Ella se encargaba de limpiar, cocinar para mí, era muy fuerte y no sé como descubrió a lo que me dedicaba y en vez de huir me pidió que quería trabajar para mí , al principio yo no quería pero algo en ella me llamó la atención, su valentía y fuerza me hicieron cambiar de opinión, así que acabe aceptando, mandé a que la prepararan, a los 17 ya fue cinturón negro a los 18 ya era una experta en armas, al principio me agradó mucho que cada día que pasaba se hacía más fuerte, pero después no se qué paso y se convirtió en una maquina asesina, su mirada ya no era la de una muchachita ingenua, cada día que pasaba ella cambiaba se volvía mas cerrada ya no me contaba nada solo obedecía órdenes. A los 20 años ya se había convertido en una maquina asesina letal que solo vivía para asesinar y aniquilar, al principio quería irse de la organización, pero yo no podía dejarla ir porque sabía que si la dejaba marchar al poco tiempo se convertiría en la asesina más buscada, así que le dije que no podría irse de aquí hasta que cumpliera la gran promesa que ella me hizo cuando aun tenía 16 años.
- Y cuál fue la promesa?
- Recuerdo que yo estaba muy enfermo y ella era la única que estaba con migo yo le hice prometer que estaría con migo 10 años y que después podría marcharse y dejar la organización.
- Huauuuuuuuu!! Entonces solo le faltan….- el joven estaba haciendo cálculos
- Ya tiene 24 años, eso quiere decir que le faltan 3 años más para que sea libre y marcharse de aquí- mencionó Claus llenando su copa de vino tinto.
- Vaya entonces solo le quedan 3 años.
- Si, muchacho 3 años para ganar su libertad, solo espero que no lleve una vida de muerte y sangre, ruego a dios para que en estos tres años algo o alguien la haga cambiar.
- Yo la conozco 5 años y solo puedo decir que no creo que haiga algo o alguien quien pueda domar a esa alma indomable yo lo intente tantas veces pero no sirvió de nada.
- Ay Arturo, me atrevería a decir que te has enamorado de Lizeth, verdad hijo?
- Lizeth, es el verdadero nombre de Debi?
- Si, ese es su nombre.
- Porque me lo dice ahora?
- Porque sé que tú eres un verdadero amigo para ella, no creo que le importe que te lo haiga dicho a demás ya es hora de que todos dejen de llamarle Debi y la llamen por su verdadero nombre. Por cierto ya es hora de que te arregles Arturo.
- Si tiene razón me voy a dar una ducha con agua fría para que se me quite esta resaca- Arturo salió del despacho dejando a Claus con una mirada muy fija a una de las ventanas.
- Lizeth… todavía tengo fe de que alguien cambie tu vida y tu corazón.

Nota: es mi primer capítulo de los tantos que vendrán espero que les guste mi historia.






Ainokusabi28 de julio de 2014

1 Comentarios

  • Ainokusabi

    el próximo capítulo estará lleno de nuevos personajes y de mucho suspense....

    28/07/14 06:07

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