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Historia Incompleta. Capítulo 3.

Era un local de ambiente sórdido. En la barra servían cervezas y demás bebidas alcohólicas. La gente bailaba al son de la música, teniendo en cuenta que su debilidad aumentaba por instantes y que tenía la sensación de que sus fuerzas la abandonarían en cualquier momento, le pareció que todo el mundo se movía muy rápido, y que la gente seguía una danza frenética. Se abrió paso entre la muchedumbre. Un hombre le dijo algo mas sus palabras llegaron distorsionadas a los oídos de Hanna. Lo ignoró.

Un par de bailarinas sensuales mecían sus cuerpos cubiertos sólo por tangas que poco dejaban para la imaginación. Pechos desnudos, melenas largas, maquillajes atrevidos y movimientos que rozaban la obscenidad mantenían la expectación del público. A Hanna aquel lugar le pareció el infierno. Avanzó, hasta tropezarse con un hombre muy alto y musculoso. Era calvo y mulato. Llevaba unas gafas de sol negras y daba la impresión de ser un guardaespaldas o portero...

-Tú debes de ser Hanna, ¿verdad?
-Eh, sí, soy yo, ¿cómo sabes mi...?-No le dio tiempo a acabar la pregunta, pues él la interrumpió.
-Walter te está esperando. Sígueme.-Dio media vuelta y entró en una puerta que ponía “Prohibido el paso”. Hanna, con intención de descubrir al fin que estaba pasando le siguió, además había llegado muy lejos para echarse atrás en el último momento. Abrió la puerta y entró. Unas escaleras en espiral, que conducían a una especie de sótano. Bajó, apoyándose en la pared, con miedo de perder el equilibrio.

Llegó abajo. Era una especie de salón grande, allí había tres personas, sentadas en unos sofás rojos, fumando algo que no olía a tabaco. Un billar al fondo y con una partida pendiente de acabar. Un mueble bar en un rincón y una puerta al fondo que ponía Wellcome to Hell . Paredes oscuras, de piedra antigua y luz tenue.

La chica bajó por las escaleras y se presentó al fin. Walter se incorporó intentando parecer cortés y le indicó con un ademán que se sentase en el sofá en frente de él. Walter era un hombre de pelo largo, muy liso y rubio casi blanco. Ojos claros y tez pálida. Era alto y corpulento. Llevaba una camisa negra y unos pantalones del mismo color. Posó una mirada penetrante sobre Hanna. La chica tenía un aspecto enfermizo. Desde que se despertara tras el accidente, fue fácil atraerla hasta allí gracias al vínculo psíquico que tenía con ella tras su conversión. Hanna había actuado tal y como esperaba, salvo que no se había bebido la sangre que le dejara y ahora estaba muy débil. Posiblemente a punto de perder el control de si misma y morder al primero que se le pusiese delante.

-Bienvenida Hanna, me alegro de que hallas logrado llegar hasta aquí... ¿dime, cómo te encuentras? Tienes mal aspecto, deberías tomar algo...
Observó que llevaba puesto el abrigo de Alice, le sentaba bien. El nombre de Alice le trajo un amargo recuerdo. Hanna se parecía a ella, quizás por eso decidió salvarla la noche del accidente.

Hanna le observó, parecía un extranjero. Sus vestimentas eran de otra época y sus rasgos del Noreste de Europa. Tenía la voz que había oído dentro de su cabeza. Tuvo la certeza de que todo lo que le había pasado desde el accidente había sido por la culpa de aquel hombre. Se sentó en el sofá casi dejándose caer, sin fuerzas.
-Walter, ¿quién es esta mocosa?-Dijo una mujer sentada junto a ese tal Walter, que miró a Hanna con cierto desdén. Se parecía a él como si fuesen familiares: rubia de pelo muy largo, delgada, alta y de tez pálida. Vestida de negro con un vestido de noche, corto y ceñido. A Hanna le pareció una mujer bastante prepotente. Ni se molestó en disimular su aversión por la recién llegada.

Había una mujer asiática al otro lado de Walter, abrazándolo y tocándolo. Le echó una mirada a Hanna pero no dijo nada. Sin embargo, Walter no prestaba atención a sus dos compañeras. A Hanna le pareció que formaban un estaño trío esos tres. Se preguntó si había sido buena idea llegar hasta allí. Necesitaba comer, y parecía estar perdiendo el tiempo.

Walter se levantó despegándose de los brazos de la asiática. Tenía una botella y una copa en una mesa, la cogió. Sirvió su contenido dentro de la copa y se la tendió a Hanna, ella le miró, sin fiarse de él.

-Yo, no sé por qué vine hasta aquí. Llevo días sin comer, estoy hambrienta...
-Lo sé. Bebé esto, en serio, te sentará bien...-Continuó Walter con amabilidad.
Ella cogió la copa con manos temblorosas, era sangre, como en el hotel.

-¿En serio esperas que beba sangre? Me parece repugnante la idea.-Dijo con cara de asco. La necesidad de comer se hizo realmente insoportable y una sensación de irá creció en ella. Agachó su cabeza.

Walter se acercó a ella, parecía preocupado.
-Déjala marchar, Walter, no necesitamos a nadie más. Además parece rara.-Dijo la rubia, mientras le daba unas caladas a un cigarrillo.

-Hanna, ¿estás bien? Bébete esto en serio, la primera vez te costará, pero te acostumbrarás...
La chica levantó su cabeza y le miró fijamente. Tenía una palidez enfermiza, ojeras marcadas y los ojos inyectados en sangre. Walter dio un paso atrás, sospechaba que Hanna estaba a punto de perder el control de si misma... Tenían un problema, sería una pena tener que matarla después de haberse tomado tantas molestias en salvarla. Hanna soltó una carcajada que atrajo todas las miradas. Soltó la copa y la dejó caer en el suelo. Se hizo pedazos y dejó una mancha carmesí en la alfombra. Se levantó rápidamente y le plantó la pistola de Alice en la frente, como desafiándolo. Walter la miró fijamente.

-Que la primera vez me costará, ¿dices? ¿De qué me estás hablando?.-Y soltó otra estridente carcajada.-Bien rubiales, te diré que haremos. Primero dile a una de tus putas que me traiga algo de comer y luego me explicarás qué coño está pasando. ¿Qué pasó en el accidente? ¿Dónde está Louis? ¿Por qué me encerraste en tu habitación? y sobre todo, ¿cómo coño es que te oigo dentro de mi cabeza?

-Hanna, no es comer lo que necesitas, sino beber lo que te ofrezco. Comprendo que estés irritada, pero tampoco te pases. Mi paciencia tiene límites. Responderé a tus preguntas si quieres...-Dijo lentamente con una voz más seca y seria. –Pero si tratas de atacarme, saldrás perjudicada. Es una pena que ese arma esté descargada, ¿verdad, pequeña?-Le dijo Walter, con una sonrisa triunfante.
-Bien, pues si está descargada no te importará si aprieto el gatillo...-Contestó ella convencida de que trataba de engañarla.
-Pues, dispara. No me harás daño. En cambio luego tendré que matarte.

La rubia se abalanzó sobre Hanna. El arma cayó al suelo, junto con Hanna y la rubia, y se disparó sola. Sí estaba cargada.
-Mocosa, llegas aquí abusando de la hospitalidad de Walter, intentas matarle y nos llamas “putas”. ¡Serás zorra! Walter, creo que voy a matar a tu nueva amiguita...
Walter apartó a la rubia de Hanna. Cogió a Hanna por un brazo, que trató de zafarse con fuerza.
-¡Para quieta, mujer!-Y le dio un golpe seco en la cabeza con la empuñadura de una pistola. Hanna perdió el sentido. Y se desplomó inconsciente en el suelo.
-¡Matthew, ve a buscar una cuerda y átala con fuerza! No quiero más sorpresas.

Walter estaba nervioso y no era algo típico en él. La rubia posó un brazo en su hombro.
-¿Por qué no has dejado que la matase? No me inspira confianza. Ya has visto la que ha montado.
-Se parece a Ella, quiero que se una a nosotros. No te opongas Leslie. – Dijo Walter, mientras se sentaba y se servía una copa.
-Nos dará problemas... Lo sé.
Arianne30 de septiembre de 2008

9 Comentarios

  • Purple

    joer k rapidez, pero tranki k lo leo ... y te dejo mi coment... chaillo

    30/09/08 07:09

  • Arianne

    Ai es que ya ten?a alg?n cap?tulo m?s, no es qe improvise en unos minutos un cap?tulo... Tardo un poquito m?s.
    A ver que te parece... Si no te gusta algo tb m lo dices vale...
    Saludo

    30/09/08 07:09

  • Purple

    tranki que seguro que me gusta.. pero como toy haciendo deberes pos me ocupa tiempo pero deberas k cuando termine lo leo...... chao

    30/09/08 07:09

  • Porroro

    Buah, se sale!

    Tiene buena pinta, leere los otros que tengas!

    Animo!Es un trabajo genial!

    30/09/08 07:09

  • Dama

    Me gusta el rumbo que esta tomando esto ........jejejeje

    30/09/08 07:09

  • Arianne

    Eses comentarios animan a una a seguir esforz?ndose en esta historia...

    Lo que menos me gusta de la historia es el t?tulo... Creo que lo cabiar? si consigo terminarlo. Se admiten sugerencias , claro... jeje.

    Un saludo

    30/09/08 08:09

  • Purple

    pobre hanna... porfin termin?... bueno est? genial, y s?, si que me ha gustado. Yo creo que en la parte 2 era louis? se llamaba asi verdad?.. bueno voya tar esperando la siguiente... chao...
    bssssssssss(parezco una abeja XD)

    30/09/08 08:09

  • Arianne

    Guay, me alegro... besosssssss abejita :)

    30/09/08 08:09

  • Purple

    XD...

    30/09/08 08:09

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