Vivencia
En el trajín diario su vida se iba lentamente sin que ella se percatara, gota a gota sin darse cuenta escapaba de su cuerpo su energía vital.
Mas cuando él reaccionó y entre hayes de dolor la llevó, la doctora solo encontró una solución, allí mismo, sin anestesia, y en su consultorio hizo lo que debía.
Pero su vida se escapaba lentamente, primero todo se volvió oscuro, las voces lejanas, no sintió sus piernas, tampoco sus brazos. Perdió el conocimiento, y al despertar si así lo podemos llamar, no podía creer lo que veía,
Su cuerpo inerte yacía en una cama, la rodeaban enfermeras, su doctora, y a los pies estaba él, mirándola con angustia por no poder hacer nada mas.
Ataron sus brazos a la cama, y colocaron agujas en ambos tratando de recobrarla. La doctora gritaba su nombre y la llamaba insistentemente.
Mientras tanto desde arriba ella veía todo como cuando de niña miraba su reflejo en el agua acostada sobre el muelle del rió que tanto amaba.
Increíble pensaba, porque aunque no puedan creerlo su cuerpo estaba sobre esa cama, pero ella estaba arriba, se sentía, escuchaba, hasta pensaba y razonaba...
-¿Me estaré muriendo? La luz blanca increíblemente luminosa no lastimaba sus ojos, una paz inmensa e indescriptible la envolvía, no había dolor, pero si una alegría infinita.
Comenzó a escuchar voces, alguien la llamaba, pero no podía mirar, pues sus ojos solo podían ver los ojos del que tanto amaba. Quería quedarse, pero a su vez pensaba -¿Cómo voy a dejarlo solo con los chicos? Que difícil elegir entre el cielo y la tierra.
De pronto la doctora lo tomo de los hombros y lo llevo al pasillo, como flotando ella salió detrás y escucho las palabras:Avisale a la madre que se está muriendo.
No, imposible!!! ¿cómo dejarlo?, y con ese pensamiento se sumió en una oscuridad que solo se interrumpió cuando varias horas después reaccionó con un shock provocado por el rechazo de su organismo ante la sangre que estaba recibiendo.
Todos los dolores conocidos y desconocidos se apoderaron de su cuerpo.
Durante cinco días lucho para permanecer al lado de quien tanto amaba, todo fue difícil, los pensamientos al querer decirlos solo formaban frases incoherentes. No recordada ni siquiera como sumar dos mas dos, su cuerpo estaba débil y no le respondía. Ni siquiera podían hablarle o caminar delante suyo sin que rompiera en llanto.
Lentamente se fue recuperando, y un día en que pudo ir sola a la doctora, tomo coraje y le dijo: creo que estoy loca! esta le pregunto porque, y luego de escuchar su relato, lo confirmo y le dijo que así había sucedido. Es más solo podía entender que estaba viva por dos motivos:Porque Dios así lo había deseado y por las ganas de vivir que tenia.
El 17 de Agosto se cumplirán veintidós años de este episodio, es el regalo más hermoso que Dios me hizo, además dejo dentro mío una pequeña llama de felicidad que inunda todo mi ser y me ayuda cada día de mi vida.
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Wersi
? Y esto te sucedi? de verdad?:
Eres increible Babcia, te admiro por lo bien que lo has escrito, ma he llegado al alma.
He venido a verte por mediaci?n de una amiga com?n y lo que me ha contado de t? es poco.
Escribes muy bien
Te pongo en favoritos para no perder tu rastro.
Un abrazo
16/06/09 06:06
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Babcia
Gracias Wersi por el comentario.
Todo lo que escrib? sucedi? tal como lo relate.
Creo saber quien es nuestra amiga en com?n, en ciertos aspectos de la vida ella es mi maestra.
Un beso
17/06/09 06:06
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Zien
Babcia te felicito, sabes expresar de forma muy clara cada detalle de una narración. SAludosss
06/07/09 10:07
