El Amor y El Destino
¿Cuando hablamos de amor en que pensamos?
¿En encontrar esa persona que te hace feliz y con la que quieres compartir toda una vida junto a ella? ¿En alguien quien te comprenda te quiera y te llene tanto como para compartir toda una vida juntos?
Seguramente si , pero no es algo que tu busques, mejor dicho el te encuentra a ti...un día como cualquier otro en el que el destino, la casualidad o como quieras llamarlo, te une con con alguien muy especial.
Una persona totalmente desconocida que en el momento menos pensado llega a tu vida, silenciosamente, de puntillas
¡y con la sonrisa perfecta, en el momento perfecto! Entra rompiendo esquemas y acabando con los principios que rigen tu vida. Llega poniéndolo todo patas arriba.
Ese tipo de persona especial que conoces una vez en la vida, en donde basta sólo una mirada para crear una química especial en el corazón.
Sí, hablo de esa persona que entra como un desconocido que pasa a ser amigo y que poco a poco te hace los días más alegres, que te saca una sonrisa sin esperarlo; de esa persona que la ves venir y te sale esa sonrisa de tonta
Sí, esa persona a la que empiezas a querer porque se lo gana con sus actos cada minuto que pasa sin saber como .
Antes de conocerlo, crees que eres feliz, pero es cuando llega que comprendes lo que es tocar el puto cielo con la punta de los dedos. Te sientes tan especial que ni siquiera necesitas motivos para amarlo, ¡sólo lo amas y ya!, y quieres vivir una vida entera con ella.
Y es justo en ese momento, en que esa persona te hace creer que el destino existe, y el tuyo, es estar a su lado. Lo llegas a amar a tal punto, que crees saber con certeza que es el amor de tu vida, que están hechos el uno para el otro.
Piensas que pasarán toda su vida juntos, sueñas que no lo perderás, juras que lo amarás por siempre , que jamas a amado a nadie como a el, le aseguras que no tienes ojos para nadie mas , le aseguras que es tuyo y que siempre sera solo tuyo estas tan enamorado que incluso te invade la loca idea de envejecer a su lado.
Lo peor es que realmente en ese momento lo piensas y crees así.. pero hay es cuando el destino entra para desmontarlo todo..
La realidad te golpea, nuevamente te sorprende, pero ahora es como despertar con un cubo de agua fría. Así del mismo modo que llego esa persona, del mismo modo se va. Ahora ese mismo destino los separa.
Es así como la vida, a veces, une a dos personas y después las separa. Es así que un día despiertas y te das cuenta que el destino es un cabrón, que esa persona que un día puso a tu lado, ya no estará más allí, que sus vidas toman un camino diferente y que quizá, nunca se volverán a encontrar. Que los sueños y promesas ya no tienen futuro. Y que esa mirada de la que te enamoraste, en realidad no estaba destinada para ti. Que las promesas del para siempre se rompen, se parten en mil pedazos de la peor manera.
A veces, el destino se dedica a jugar con nosotros, como si todo lo que necesitamos para ser feliz es lo único que no podemos tener. Nos maneja a su antojo, nos permite conocer el amor, y él mismo se encarga de quitarlo de nuestra vida. No lo culpo, ni le reprocho nada, quizá somos nosotros que a pesar de luchar por lo que amamos, las circunstancias no están a favor; porque quizá si estábamos hechos el uno para el otro, pero no estamos destinados a estar juntos, sino a ser una lección más en nuestras vidas. Tal vez para algunos la vida se trate de eso.
Así que si no pueden tener un futuro juntos, si están destinados a no ser, haz que al menos, sea lo mejor de tu pasado.
Bacana19 de septiembre de 2015
