-El golpe del juez hirió sus delicados oídos. Luego esos roces, a su espalda. La gente comenzaba a abandonar el juzgado.
--Otro golpe volvía a sacudirla en espanto. Se habían caído sus hombros rompiendo las losas, reverberando excusas. Empezaba a percibir esa clase de llanto que viaja sin pena.
---Y ese último golpe quizá el más salvaje, el más cruel. Un dedo muerto chocaba contra una lengua durmiente. ¿Qué sueñan las lenguas?
- Siempre intento llegar más lejos ocultando lo que no veo. Y hay raíces desnutridas, y hay estrellas ardiendo, y hoy yo...tan lejos de sus mundos. Aprendo aquí a ser ignorante. - ¿Qué sueñan las lenguas?-Ignoro que fui una llama amaneciendo en sus entrañas, me desenvuelvo en atardeceres.
Ahora soy llanura y siento como los vientos me aplanan año a año y a veces la lluvia me hace hondar, me convierte en prisión.-¿Qué sueñan las lenguas?-Pero en algún momento conseguí ser cumbre. - Meditaba consigo, aquel ruido despiadado interrumpía a su conciencia.
Un dedo muerto chocaba contra una lengua durmiente. ¿Qué sueñan las lenguas? como siempre tu talento refulge, me levaste a una Torre de Babel, ya nacida muerta, excelente.
