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Decisiones 6

Pero ni en España había pena de muerte ni volvió a saber nada más del presidario. Laura no era de esas personas que se enamoran perdidamente y luchan por su amor. Para empezar, lo que se dice enamorada nunca había estado, al menos que ella supiese, si se exceptuaba aquel compañero de estudios, y en realidad más que amor eran pocos años e ignorancia de la vida. Y tampoco era de las que luchaban a brazo partido por conseguir a alguien. Más bien era de las que se dejaban querer, pero si no veía de la otra parte un mínimo interés ponía pies en polvorosa. De joven pensaba que la vida era demasiado corta para perderla en correr tras quien no lo merecía. Y ahora mismo, lo que son las cosas, opinaba que su vida estaba siendo demasiado larga, pero sobre todo aburrida.
Si encontrase algo que la atrajese quizá se olvidaría de una vez por todas de suicidarse. Había probado ya unas cuantas cosas y ninguna la había llenado al cien por cien. Mientras tomaba café sentada en la terraza de su casa y veía pasar la gente a través de la valla de madera se acordó de aquella época, cuando todavía no le habían dado la plaza de maestra, que para sacarse un dinero estuvo cinco meses haciendo de locutora de radio. Era en ese momento en que estaban de moda los programas de canciones dedicadas y ella estaba harta de leer dedicatorias estúpidas de soldados haciendo la mili a sus novias, o de padres que las dedicaban a sus retoños en el día de la primera comunión. Para no aburrirse demasiado le dio por pensar que algunas de las dedicatorias eran mensajes en clave de agentes del SECED, como si no tuvieran otra manera de comunicarse. Pero ella era joven, imaginativa y hambrienta de historias suculentas que animasen su vida de señorita de provincias.
El director de la emisora, viendo que tenía una bonita voz y mucha iniciativa le propuso que hiciese doblete, y además de las dedicatorias llevase un consultorio sentimental, que también en aquellos tiempos estaba muy de moda. Al principio le pareció una locura pero después se dijo que podía ser interesante. Lamentablemente el programa duró tan solo dos meses, aunque tenía mucha audiencia, o quizá por eso. Sus consejos eran los menos adecuados para aquellos tiempos en que reinaba el viejo general con su señora esposa y los sempiternos collares. En un país en que la divisa era el matrimonio para toda la vida y la familia unida rezando el rosario vespertino, no era apropiado aconsejar a la señora a quien habían puesto unos monumentales cuernos que hiciese ella lo propio con el desgraciado de su marido. Ni tampoco decirle a la novia que dudaba si entregarse o no antes del matrimonio, que no fuese mema y catase el material, por si las moscas.
Una tarde el director, padre de familia numerosa y visitante asiduo de los mejores burdeles de la ciudad, la llamó enfadadísimo a su despacho y la amenazó además de con todos los tormentos del infierno, con denunciarla por conducta indecorosa. Y ella recogió de su mesa las cuatro cosas que tenía y se marchó a su casa muy digna, pensando que al menos había puesto su granito de arena para la transformación del país.
Por eso cuando luego, ya con muchos más años, vio “Los puentes de Madison”, hubiese estrangulado de buena gana a la pánfila de Meryl Streep por ser tan idiota de dejar pasar la oportunidad de su vida y quedarse al lado del imbécil de su marido. Pensaba que los maridos estaban muy sobrevalorados y sin duda eran mucho mejor los amantes.
Beth14 de septiembre de 2015

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13 Comentarios

  • Sandor

    Esta entrega ea genial...me he reido un montón en medio del insomnio..Realmente es muy bueno.No sé la causa de que los textorianos
    no estèn enganchados a esta serie que recomiendo.
    Besos

    Carlos.

    15/09/15 02:09

  • Beth

    Tú y yo,querido Carlos,hemos vivido la época de las canciones dedicadas y los consultorios sentimentales. Besos y gracias por tu presencia

    15/09/15 09:09

  • Avelibre

    Beth,

    creo que no nos conocemos desde antes.

    He llegado a tu texto sin esperar, ni remotamente, un espacio de letras tan incríble. Tienes una manera de escribir que atrapa al lector. Es una justa combinación de todos los ingredientes necesarios para crear esta maravilla.
    Amo la lectura, siempre, y digo siempre, me acompaña un libro a donde vaya. Disfruté tu texto al máximo. Será un placer seguirte.

    Un aplauso bien ganado!

    Saludos

    15/09/15 04:09

  • Sandor

    Beth, que tál poner a medias aquí un consultorio sentimental? Podíamos llamarla :"La bocca della verità" un servicio a los que escriben en tus textos, sin ánimo de lucro.Esa legendaria boca que hay en Roma que según la leyenda , el que introduce su mano en ella, y le hace una pregunta , faltando a la verdad, se la come. Ibamos a tener que asociarnos con una aseguradora, iba a ver muchas manos tragadas.
    Es una propuesta, tu eres la que encargada de los papeles legales, IVA que soporta, plus de nocturnidad, etc.
    Un beso
    Carlos

    15/09/15 04:09

  • Sandor

    BETH, ves, esto se corre, yo a AVELIBRE no lo conocía, mejor no la conocía, que me equivoqué del género al que pertenecía en su primer escrito y aprovecho ,por si ,ella lee esto, si sabe el genero de una gran persona y escritor/a que se llama Paulatinamente, que ayer tras el error co nCaro (Carolina, supongo...AVELIBRE) me vino la duda del género al que pertence alque hasta ahora le doy título de varón, pero eso de Paulatinamente me suena a Paula.

    15/09/15 04:09

  • Avelibre

    A ver Sandor...,

    mira que te voy a tomar la palabra con eso de que eres un "desastre", (que conste que lo has dicho tú, no yo).
    Partamos por aclarar algunas variables diferenciales entre géneros que parecen absorberte... .

    Sí, el Caro viene de Carolina.
    Soy mujer desde que me conozco.
    Las aves no se diferencian según el sexo, (lo que quiere decir que no me quedaba de otra que ponerme Avelibre ya que el programa no me permitió separar palabras, lo que me daña la vista desde hace años).

    En cuanto a Paulatinamente, no puedo confirmártelo pero he sacado la misma conclusión que tu, debe ser por Paula, (lo que me hace pensar que es también es mujer).

    Por último, lo del "Consultorio Sentimental".... . Beth, yo lo encuentro magnífico, es más puedes recurrir a mí si necesitas ayuda para hacerle un poco de marketing, ya sabes, con ésto de que soy un/a ave, puedo sobrevolar TT y tirar algunos panfletos desde la altura.

    Saludos a ambos

    CAROLINA

    15/09/15 04:09

  • Voltereta







    15/09/15 08:09

  • Voltereta

    Ese tema se lo dedico a Laura y a ti, Beth, creo que os va a la perfección.

    Llevo siguiendo tu relato desde que lo iniciaste y a pesar de que ha avanzado muy poquito, la verdad es que me está resultando muy ameno e interesante y lleno de verdades lapidarias. Estas desribiendo a través de una persona a una sociedad y la verdad es que hasta ahora lo estás haciendo de maravilla. El texto, tiene ironía, tiene filosofía de la andar por casa, es decir que es facilmente entendible por cualquiera y encima cuando se acaba cada parte, uno quisiera continuar leyendo, por tanto tienes a tus lectores enganchados y eso es lo que consiguen sólo los buenos escritores.

    Espero ansioso la continuación.

    Un saludo, Beth.

    15/09/15 08:09

  • Beth

    Queridos míos, todos: gracias mil veces. Acabo de terminar, valga la redundancia, una novela que lleva mucho de mi, mucho de realidad y que por tanto me ha dolido hasta dejarme desangrada. Me he vaciado con ella y ahora necesitaba algo de dislate y de locura. Laura me lo dará y yo a ella. Voy por el capítulo 17 pero aquí he puesto pocos, entre otras cosas porque he estado de viaje. Prometo seguir.

    Y lo del consultorio...encantada. Es algo que ha crecido conmigo. Mi madre cosía y mientras yo hacía los deberes sonaba Elena Francis, que era un hombre, parece ser. Quiero un consultorio, y que me cuenten cosas, y llorar y reír, y dar mi opinión, y sentir que estoy viva.

    Vosotros y un pequeño peludo que duerme a mis pies y que me adora me hacéis la vida más agradable.

    Besos muchos.

    15/09/15 10:09

  • Avelibre

    Si, si, ya sé que te lo he comentado, pero eso fue cuando todavía no había leído los anteriores.

    Ahora más que nunca apoyo y salgo a buscar simpatizantes para crear el consultorio sentimental que te ha propuesto Sandor. Es más, yo me ofrezco para ser la primera en exponer todas y cada una de mis dudas con respecto al género masculino. (Me parece justo avisarte que tengo preguntas como para ir preparando material como para dos años).

    Si, si, ya me voy al 7.

    Caro

    PD: No ignores mi ofrecimiento por favor.

    16/09/15 05:09

  • Beth

    No solo no lo ignoro, Caro, sino que te tomo la palabra. Quiero consultorio. Incluso ayer, sin saber nada, y en el colmo de la locura, me he comprado un turbante con el que parezco una pitonisa chalada y que me queda fatal, pero me siento bien cuando escribo con él coronando mi jaula llena de grillos, o sea, cabeza. Consultorio ya.....

    16/09/15 09:09

  • Danae

    Ayyy, que todavía está esa sociedad, hipócrita y fanáticamente religiosa, viva!
    Me he reído y me he indignado, todo en uno! (Espero no volverme hiper-reactiva con esta historia tuya ...)
    Un beso grande!

    20/09/15 06:09

  • Beth

    Pues me alegro de lo uno y lo otro, querida Danae, de la risa y la indignación. Señal de que estamos vivas. Gracias por leer y besos

    20/09/15 08:09

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