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Crisis de Confianza (i)

Cuando muchos hablan de una crisis económica, yo prefiero hablar de una crisis de confianza. La cual es, líder y única culpable de la posterior crisis monetaria.

Y es que, no deja de ser curiosa la situación, recordemos ese dicho de: “se cree el ladrón, que todos son de su condición”. Unos señores banqueros (Cuando me refiero a banqueros, me dirijo principalmente a sus directores, gerentes, etc.) han despilfarrado el dinero que cada humilde ciudadano le “donaba”, han llenado sus cuentas corrientes con la confianza de miles, millones de ciudadanos… Y ahora resulta, que toda esa confianza depositada, se ha desvanecido, marchado, esfumado… Ahorros de tantos años, se han ido por el retrete… Y aquí viene lo más gracioso, esos pequeños, humildes y sanos ahorradores de confianza, no se han venido abajo, y siguen confiando en aquellos que se la perdieron (que bonita es la “amistad” y la “Fidelidad”), pero son esos que la perdieron, los que ahora no la tienen en sus clientes… ¿Cómo se explica eso?.

A los banqueros ahora les atormentan las dudas entre ellos, preguntándose cada uno, - si yo lo he hecho con mis clientes… ¿Puedo confiar en que no lo haga ningún otro banco (compañero) conmigo?-

Y es aquí, donde entran en acción las empresas calificadoras, otras traficantes de sueños de esta película, empresas que existen para calificar el nivel de solvencia (rating) de sus clientes, si han oído bien, sus CLIENTES, es decir, yo pago a esa empresa para que me valore cuan solvente soy… Increíble ¿verdad?...

Pues al final pasó, lo que sucede en toda trama donde, una empresa con poder “mundial”, es dirigida por unos cuantos corruptos, o dicho de una manera más profesional, ambiciosos sin límites. Empiezan a recibir increíbles cantidades de dinero, por calificar bien a bancos, que no están tan bien… ¿Con que fin?, pues para que estos bancos puedan vender Activos financieros (tóxicos) por todo el mundo (a esto es a lo que se le llama globalización).

Obteniendo como resultado, que todos los bancos del mundo, estén llenos de activos tóxicos (llamamos así a los activos, letras, hipotecas, que no van a ser satisfechas en su totalidad por sus pagadores), o lo que es lo mismo, dinero que creen tener, que creen que van a cobrar, y que en realidad solo es humo…

En el momento que todos los bancos del mundo se dieron cuenta que desconocían la cantidad de activos tóxicos (también llamados CDO) que tenían en sus balances, empezaron a desconfiar (y ahora con razón) de todos los bancos, personas, etc… Ocurriendo que se negaran a prestar dinero a quien fuere, si no era con unas garantías más altas de las que deberían de haber pedido años atrás…

Ocurriendo que bien, a las personas trabajadoras, les pedían innumerables avales (los primeros años, valía la opción de avalar con un piso, pero recordemos que son bancos, no inmobiliarias, y ellos “no saben” vender pisos. Ya explicaré esto más adelante) y a los bancos, o también llamados intermediarios financieros, de otros países, les exigían una mayor tasa de interés por prestarse dinero.

¿Qué efecto tiene esto? Que la gente empezó a ver imposible que les concedieran préstamos, con lo cual, no podían comprarse pisos, las constructoras, no vendían esos pisos que construían… Entonces empezaron a dejar de construir lógicamente (hay que recordar que en ese momento España vivía principalmente del ladrillo, era “su” industria), tras la negativa o mejor dicho imposibilidad de seguir construyendo por parte de las constructoras, empezaron a despedir a empleados que ya no les hacían falta, y lógicamente, estos empleados tienen unas familias, donde a partir de ese día, el dinero ya no llegará a final de cada mes, por consecuencia esas familias empezaran a recortar gastos (vacaciones, caprichos, regalos, etc.), y las empresas donde antes se vendía mucho, ahora se vende poco, y entonces ¿que pasará con las empresas que vendían poco?, que desaparecen, lo que es igual, más gente al paro, más familias sin ingresos, más familias que ajustan sus economías y que no gastan lo mismo que antes…

Y podría seguir así toda la vida, porque esto es la pescadilla que se muerde la cola. Por eso dije al principio de este texto, y sigo diciendo ahora, que el principal problema de Europa y España, es la confianza de todas las partes, Gobiernos, Intermediarios financieros, ciudadanos, etc… Hasta que no empecemos a confiar en que vamos a prestar dinero, y en que nos lo van a devolver, esto será imposible sacarlo a flote. Podrán hacer recortes, quitarnos servicios, etc… Pero si no empezamos a garantizar y confiar en que nos pagarán lo que prestamos, no servirá de nada…
Danielduran619 de noviembre de 2011

1 Comentarios

  • Macabru

    Hola DanielDurán estoy de acuerdo en varias cosas que comentas en tu análisis fundamental ... vivimos un estado de desconfianza global, pero es obvio que no sólo las olas son mar...vivimos un cambio de escenario en el que muchos factores crean sinergia con la economía internacional, no hay que olvidar la especulación de los grandes mercados "Buy when there is blood in the streets" o nuestro castizo "A río revuelto ganancia de pescadores" y la panda de chorizos que se lo han estado llevando calentito.

    Pero en esto consiste el Neoliberalismo: antes te borraban como individuo y ahora te borran como nación.

    Gracias por tu propuesta de posts.

    Macarena B.

    19/11/11 10:11

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