Esta frase la ideé yo, como pensamiento propio, dentro de un comentario que hice a mi texto titulado "En polvo se convirtieron". Y la ideé y plasmé por escrito para la posteridad de la Literatura como respuesta opuesta a la que dijo Marcel Proust, el cual dejó escrito que "Sólo se ama lo que no se posee totalmente". Soy contrario por completo al pensamiento de este tal Proust que tantas mentes ha torturado a lo largo del ya fallecido Siglo XX. El caso es que un compañero y amigo de Letras me preguntó si mi frase/pensamiento la exponía yo como una pregunta o como un afirmación. Le respondí que era una afirmación mía y que la iba a explicar con razonamientos válidos y valiosos. Es ahora la ocasión de explicarlo una vez que espero que se hallan tranquilizado los ánimos de los más inquietos.
Hace ya mucho tiempo estuve escribiendo sobre el asunto de la Ley de Atracción Universal. Entre otras cosas deducía yo que nuestra realidad humana puede transmitir ondas hipersensoriales que nos ponen en contacto, consciente e inconscientmente al mismo tiempo, con todo aquello que pensamos de manera continua y concreta y que, al final, por esa relación pensamiento-sentimiento, se nos convierten en hechos reales. No voy ahora a repetir otra vez textos relacionados con este asunto pero lo traigo a este texto para ubicarnos en un punto de origen de mi frase/pensamiento.
Fijaos bien en lo que dice: "Siempre se posee todo lo que se ama" y descubriréis fácilmente que no he dicho "Siempre se posee todo lo que se desea". Sobre lo que se ama y sobre lo que se desea y, sobre todo, la gran diferencia que existe entre los que se ama y lo que se desea he escrito bastantes veces y tampoco viene al caso reproducir ningún texto ahora; pero de ello deduzco lo siguiente: la Ley de Atracción Universal no hace realidad nuestros deseos que, en muchas ocasiones, son impuros; sino que hace realidad lo que amamos de manera consciente o inconsciente. Este es el punto que debemos analizar para saber por qué dije yo "Siempre se posee todo lo que se ama" en lugar de decir "Siempre se posee todo lo que se desea".
Voy a poner un ejemplo muy sobresaliente. ¿Cuántos hombres desean muchas veces a las mujeres que están casadas con otros hombres y fracasan estrepitosamente en sus deseos? Muchas veces más que lo contrario. Y eso se debe a que los deseos no encierran, en sí mismos, los amores. Si una mujer casada ama a su esposo ningún otro hombre, por muchos deseos que tenga, consigue conquistar y arrebatar esa mujer al hombre al que esa mujer ama y por ello se ha unido con él hasta la Eternidad. De acuerdo en que me estoy moviendo en el mundo de los cristianos pero es mi mundo y por eso manejo mis ideas y mis pensamientos dentro de mi mundo y no en los mundos como el de ese tal Proust que dejó escritas muchas páginas horribles por su terquedad en querer decir que todos los humanos somos absurdos.
El absurdo proustiano puede ser valioso para los hombres que desean pero existen muchos hombres que no desean sino que aman. Está super demostrado que si una mujer ama a un hombre jamás la consigue conquistar un hombre que sólo la desea. Este ejemplo es el primero que me viene a la memoria pero podéis sustituirlo por otro de los muchísimo ejemplos que existen en la vida humana.
Entramos en lo que es amar. Amar no es desear. Amar es querer. No es lo mismo desear que querer. En cuanto al amar hay seres humanos que aman a sus mujeres propias pero otros anteponen amar más el dinero, o el deporte, o la política, o la religión o cualquier otro asunto materialista que querráis pensar. ¿Y qué se consigue poseer cuando se ama lo que se ama? Se consigue poseer no lo que se desea sino lo que se ama. Por eso he rebatido la frase/pensamiento de Marcel Proust (del cual ni he sido seguidor nunca ni jamás lo seré porque sólo sigo el ejemplo de Jesucristo) y llego a analizar que cuando un hombre desea algo más una cuestión materialista que una cuestión que unifique materia con espíritu es un hombre perdedor que "ama lo que no posee" mientras que quien sabe amar lo material junto con lo espiritual, en un equilibrio perfecto, es que "posee lo que ama".
Me parece que he sido concreto y como no quiero extenderme sobre el tema (porque tendría que estar escribiendo horas enteras sobre ello) creo que acabo de responder acertadamente a la inquietud de mi compañero y amigo de Letras o a quien esté interesado en saber por qué digo y mantengo que "Siempre se posee todo lo que se ama" y no he dicho para nada que "Siempre se posee todo lo que se desea". Espero haberlo dejado claro.
