¿Quién mejor que yo, juez supremo,
hontanar de anestesia, traición,
triunfalismo y manipulación,
para, al ayer, imponer mi baremo?


¿Qué mejor momento que ahora,
cuando la agonía apremia,
en mitad de una pandemia,
para reescribir la historia?


¿Qué mejor traje a medida
que un pretérito absoluto,
recortando lo fraticida
de un bando glorioso e impoluto?


¿Qué mejor asunto entre manos
que un anteproyecto kafkiano
para sacudir sepulturas?
¡Ojo! Sólo de la dictadura,


que con los crímenes recientes
tenemos que ser más clementes.
Y es que el gudari, buen cliente,
nos va a dar apoyo urgente.


¿Qué mejor testamento vital
que, con las leyes de lo fútil,
crear la casta más inútil
y enraizar el dogma social?


Adoctrinar en la escuela
y crear fiscalía de sala,
garantía que acorrala
la huella de la bisabuela.


¡Abrasemos el ambiente!
¡Pleguemos los puentes!
¡Reabramos el frente!
¿Salimos más fuertes?


Democracia,
de los hombres un tratado.
Memoria,
del alma un grabado
afectivo,
subjetivo,
de un tiempo pasado.


Basado en hechos reales e inspirado, en parte, en “Memorias”. Autor: Remi. http://tustextos.com/remi/memorias/

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4 Comentarios

• 

  Enxebre

  Una ironía con mucha fuerza y muy original

  12/11/20 01:11

• 

  Patroclo

  Punzante. Especialmente el gudari, hoy.
  
  Kierkegaard decía algo así como que cuanto más sufrimos, más sentido tiene la sátira. Crucemos los dedos para que este tipo de textos no sean considerados como enaltecedores del odio o "contaminantes de la opinión pública".
  
  He leído ambos, un placer haberlos encontrado

  17/11/20 03:11

• 

  Remi

  Historia pasada e historia presente te inspiran en esta contundente y cruda poesía. No pierdo la esperanza de que no se reescriba la historia sino que se aprenda de ella, en caso contrario las "Memorias" dolerían más.
  Es un honor que te inspirases, en parte, en mi texto. Me ha gustado leerte, he necesitado a la RAE para algunas palabras.
  Un abrazo Dysania.

  18/11/20 05:11

• 

  Clopezn

  Lo peor de todo es usar la memoria para velar el presente. La memoria hay que honrarla y respetarla, pero desde la objetividad. Durante una contienda ambos bandos son parciales. Cuando acaba, esa parcialidad no se resuelve. Sólo prima la versión del ganador. Cuando la víctima tiene ocasión, se intercambian los papeles. La memoria ha de servir para aprender de ella y por supuesto hay que sacarla a la luz, pero no ser una nebulosa que envuelva los errores propios de acciones presentes.
  Contundentes versos estupendamente hilados.
  Un saludo cordial.

  23/11/20 12:11