Callando El Silencio.
Me gustaría saber si se pueden conprenden las palabras. Si un sentimiento en tinta puede estremecerte el alma y hacerte sentir que te estoy mirando a los ojos. Me faltaria el cuerpo para poder abrazarte mientras tanto
y todas las palabras que no te llevasen al cenro de mi corazón, todas, estarían de más.
Y ahora con pocos recursos
he decidido derrochar cada palabra en el intento de enamorarte minuto a minuto sin que pase el tiempo. Me falta pues en este vacío el ramo de flores y la gabardina no tan elegante que no es propio de mi estilo. Me falta pues en este vacío el camino de mi escalera a tu ventana. La ventana a la que entraría cada noche para secuestrar tus sueños y desgarrarte suave. Convertir mis besos en los hilos que une tus deseos a mi cuerpo. Cada noche en cada gesto
por la carretera que nunca, repito, nunca, me lleva a ti. Por eso cada mañana tu te encuentras agarrandote las rodillas bajo la lluvia. Esa lluvia que ni te enferma ni te moja. Esa lluvia egoista que te toca y no me permite sentir el placer de tocar tu piel con una mano, ni con mi cuerpo.
Callando el silencio en el vacío de esta habitación de hotel donde fumando un cigarro sueño, que tal vez una noche, solo una, vuelvo a casa para que sin que nadie diga nada, sin que nadie opine, pueda por fin, alegremente, quedarme despierta para siempre.
