La Palabra
En las próximas horas tendrás que morir.
El filo de una estrella reposa sobre la palabra,
Como ya en otros poemas había reposado,
Esa palabra de la que no hay que mencionar para ser poeta
Y hay que describirla como si existiera,
Pretendiendo saber que es lo que hace un escritor.
En realidad no existe, y si existiera,
Un poema de ella ya se hubiera hecho,
Como Dios añejado en su sabiduría,
No es viento, no es fuego, un barril o una tuerca.
Lo es todo, como ruido sin silencio,
Como la música que se miden en frecuencias,
Un acto de roce y calentamiento
O tan abstracto como sumar, querer, olvidar.
Hay que mencionar esa palabra no dicha para ser poeta .
Hay que herirse para poder amar,
Y mientras no se pueda,
El dolor ajeno será inevitable,
Como un acto objetivo de entre centímetros que pasaron en segundos en que sin esa palabra se hizo;
Así,
Para que un roce u ondas de frecuencia no mueran en eso,
Si no la lírica, el verso, se anime de donde uno nace, hasta donde uno muere,
Levantarse de lo más rápido a gritar la vida,
A encontrar el color que falta,
Buscar las horas pérdidas,
Sanar tristezas,
Sentarse sobre un coche y besar.
Recordando en cada paso de la vida que en las próximas horas uno tendrá que morir pronunciando esa palabra.
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Migue
un buen texto espazmo...
me gusto
y mas como lo terminas
cuidate y suerte
12/04/09 09:04
