¡Me estás observando...mónstruo del Mal, criatura de los laberintos, creación del Miedo y de la Ira! ¿No sabes que estoy ciego? Antes pude ver y mis ojos descubrieron la literatura como el gran teatro del Mundo. Sé de ti, mónstruo infernal, porque vives en los libros y eres parte del conocimiento universal. Tu centro es el mismo que los transgresores de la ley, los dictadores que usurpan reinos, los débiles vestidos de militar y espada en alto, los torturadores de la inocencia...ese es tu centro y esa es tu imágen. Picasso te adoró, no por tu centro, sino porque cualquiera de nosotros puede hallarte, encontarse en tu misma piel, adornarse con tu misma monstruosidad, atravesando laberintos sin límite. Soy un simple escritor, alguien que se abstrae para ser naturaleza de silla, cuerpo de libro, mente sublimada. Me has devorado muchas veces, incluso me has mostrado el camino de la confusión, pero no he caído en tus fauces de Toro, de Cronos taurómako...¿Mi gran decepción? No...no creo que sea la usencia de fama; al contrario...Obtuve mi ceguera como única oportunidad de no ver mi imagen en los espejos, pero escribí sobre ellos. Devoré las cadencias del delirio, bailando con mi soledad y simulando ser un falso dios humillado por su ego. ¿Los ángeles? Los ángeles siempre han estado sosteniéndome los libros, y susurrándome infiernos que calmaran mi sed de sabiduría. ¡Tú eres, Minotauro...la única ocasión de regresar al mundo, de metamorfosearme en ti y esperar...que el laberinto se torne en línea de horizonte, luz, habitáculo unido a la verdad, tan ausente de vida, que ciega los ojos de quien trata de encontrarla.

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4 Comentarios

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  Serge

  Greko:
  Como bien dices ese minotauro esta dentro de todos y cada uno de nosotros, siempre al acecho esperando manifestarse. Ese minotauro son todas las pasiones que nos arrastran y nos destruyen.
  Como siempre haces un gran despliegue de tu conocimiento y de tu sensibilidad a la hora de escribir.
  Espero ver pronto a Ariadna con su ovillo para que me señale el camino de salida.
  
  Un gusto enorme leerte.
  
  Serge.
  
  Pd: La taza de té se enfria, regreso a mi laberinto.

  30/06/11 06:06

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  Agora

  Profundo el laberinto y magistral tu minotauro;
  me viene a la mente "La prueba del laberinto" de Mircea Eliade, si no lo has leído creo que te gustará mucho,
  saludos

  30/06/11 07:06

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  Retales

  Encontrarse a si mismo luchando con el YO interno. Buscas tu esencia escondida en ese lado oscuro de la LUna.
  Sublime, maestro.
  Gracias y saludos.

  30/06/11 08:06

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  Vocesdelibertad

  Entre más se adentra más salvaje se vuelve, lo cierto es que debe apartarse hasta que huela a muerte para ser libres de su condena, importante es recordar el camino de regreso a la libertad.
  
  Excelente momento de reflexión cultural,

  05/07/11 10:07