Benjamin
Qué grandiosa paradoja!...
La facilidad para escribir textos infinitamente maravillosos con el miedo a ser publicado... La capacidad de escritura personal que posees (vuelvo a incidir, maravillosa), puesta en manos de gente que al leer puede comentar con total sinceridad lo bueno o malo de un texto, que en sí no deja de ser una crítica personal, pero, infinitamente mucho más aceptable que de aquellos intransigentes dogmáticos pusilánimes, en la gran mayoría, que critican un arte fascinante al igual que arduo y complicado, sin llegar a producirlo ellos mismos, y que dictatorialmente sentencian los buenos de los malos textos (léase libros, etc...) y excluyen los gustos de todo un mundo por los suyos propios.
Qué maravillosa experiencia el leerte en cada texto.
Recibe muchos besos...
18/11/11 02:11