TusTextos

Planeta DesolaciÓn

Si la soledad es una especie de castigo ejecutado por un ser supremo, el abandono total de mi humanidad seria la condena mejor diseñada por el lado oscuro de este ser divino, en todo caso les diría, bienvenidos a “planeta desolación”...mi mundo, mi condena.

1-Despertando

Mis párpados me pesan, siento en el interior de mis cuencas la piel viva de mis párpados rozando con la superficie de mis ojos, seguido de un ardor profundo que me los hace cerrar una y otra vez hasta que el dolor se aleja. No puedo centrar la mirada, veo una imagen borrosa como si fuera una neblina suave que se va dispersando, mi cabeza esta a punto de estallar, mi cerebro se expande una y otra vez como queriendo escapar de mi cráneo.
Mi pecho toma un poco de aire y lo escupe a través de la garganta acompañado de un poco de sangre. Lo primero que me viene a la mente es si algún hijo de puta me dio una terrible paliza o me acabo de caer de un encimo piso o quizás mas alto aun.
Trato de incorporarme, siento debajo de mi una superficie áspera, estoy sobre un piso de madera muy deteriorada, quien sabe de cuantos años, miro alrededor y veo un par de muebles podridos por el pasar del tiempo, poco a poco voy tomando conciencia y con ella la incertidumbre y el miedo se empieza a apoderar de mi mente y mi cuerpo lo proyecta con unos leves escalofríos seguidos de palpitaciones provocadas por el miedo mismo.
A simple vista estoy en una casa muy antigua y veo que por el polvo y los muebles podridos estuvo abandonada hace muchos años, no creo encontrar rastro alguno de humanidad en este lugar, sin embargo tembloroso me pongo de pie y seguido de un grito medio ronco por mi garganta lastimada digo... “hay alguien” y el silencio se burlaba de mi persona una y otra vez.
Miro hacia un costado y veo una escalera prácticamente destruida, intento subirla con cuidado, creo que hay un piso mas. Mis pasos hacen rechinar la madera y rompen de a poco este silencio perpetuo, estoy en el primer piso y veo una sala inmensamente vacía, ni siquiera los espectros atrapados que vagan entre dos mundo paralelos quisieran habitar este lugar sombrío.
Bajo las escaleras mas desorbitado que nunca, tembloroso, mi mente esta tratando de descifrar respuesta alguna a este lugar que inspira un vacío infernal, mi cabeza gira sobre mis hombros y veo una puerta, voy hacia ella y con mis manos un poco temblorosas logro abrirla, la proyección de mis ojos en un parpadeo llega a mi cerebro y este por mas que quiera encontrar una respuesta razonable para esta imagen de desolación tan pura y simple no lo lograra.
Una imagen que refleja el abandono traducido en un paisaje, una imagen que refleja un abismo de soledad infinita que habita en el interior de mi alma y pareciera que floreció hacia el exterior creando este mundo, creando este planeta de desolación!

2-El lugar

Mis ojos penetrantes sobre el paisaje, no puedo reaccionar, no se me cruza nada por la cabeza, mis sentidos totalmente paralizados, voy saliendo de la casa con lentitud sin quitar mi vista a lo inimaginable. Dios mío atino a decir en un balbuceo estúpido, no puedo creer lo que mis ojos logran percatar, me siento tan insignificante y solo a la vez, que mi tristeza se agudiza poco a poco. Como explicar este lugar tan desolado, tan apartado, un pequeño planeta de desolación suspendido en el cielo, ¿pero que cielo?, ¿en que parte del cielo?, ¿cómo llegue hasta aquí?, ¿dónde estoy?, ”por dios” , exclame, ¿dónde estoy?, preguntas razonables para esta situación pero mi única respuesta era el silbido incesante del viento.
Miro para atrás y veo la fachada de la casa antigua devorada por el tiempo, sigo en mi observación y veo un campo verde como si fuera el patio de una casa, pero aunque suene ridículo abarca la mitad de este diminuto planeta y la otra mitad mas ridículo o extraño aun, esta cubierta por mar.
A mi izquierda puedo ver un árbol tan solitario como mi persona y juro que no hay nada mas en este lugar de soledad pura. Voy caminando hacia el árbol, mi cuerpo todavía dolorido hace que mis movimientos sean lentos, llego hasta el y veo que es un simple árbol de manzanas, sonrió por un segundo y pienso, al menos tengo para comer, luego miro hacia el cielo y veo que sobre este prado verde hay un cielo de nubes gordas y blancas un cielo bastante agradable diría yo, en cambio veo a lo lejos, si se puede llamar lejos a esta distancia, veo que sobre el mar hay un cielo turbio, con nubes negras y amenazantes como si hubiese un clima de tormenta constante, es una mezcla de dos climas en una distancia tan pequeña.
Voy caminando hacia el mar y noto como el clima va cambiando, un aire fresco y acelerado roza mi piel y me provoca escalofríos, sigo caminando y me detengo en la orilla. Ráfagas de viento helado, el mar dando golpes sobre algunas piedras, el cielo negro y tormentoso, por instantes algunas lloviznas rozan mi cara y me despabilan poco a poco de esta realidad tan extraña, puedo ver en el medio de este corto mar una rocas amontonadas que forman una pequeña isla en el centro.


Empiezo a recapacitar un poco, aunque con miedo e incertidumbre trato de pensar en donde estoy parado y el porque. Pienso: estoy varado en un planeta donde lo único que hay es un prado verde, una casa que esta destruida por el tiempo, un árbol de manzanas, un mar pequeño con algunas insípidas rocas y en el cielo dos climas distintos sobre el mar y sobre el prado.
Entonces miro alrededor y lo único que logro escuchar es el silbido del viento que roza mis oídos y me cuenta que no hay nadie mas en este lugar, que desperté aquí solo y que la única manera de haber caído en este páramo desolado es porque alguien lo quiso así, el porque no lo se, quizás en algún momento lo averigüe, pero en este preciso momento el silbido del viento me comenta al oído condenándome, que el abandono se a proyectado ante mis ojos y me tortura el saber que mi estancia en este lugar no será un simple paseo de fin de semana, sino un castigo de soledad propiciado por el capricho y antojo de alguien, un ser superior, tal vez mi verdugo, tal vez mi dios!

3-El pozo

Horas, días, meses y años y mi cuerpo no sufre el paso del tiempo, una cosa mas para pensar que esto esta preparado con algún fin. La única que sufre las consecuencias de este páramo desolado es mi perturbada mente, que trata de analizar todos los días que hago en este planeta desolado. A veces entono algunas carcajadas siniestras, que me hacen notar la perturbación de mi cabeza provocada por tan larga soledad, por la desesperación que me provoca esta aquí abandonado al antojo o capricho de alguien.
Sin embargo luchar contra esta soledad me ayudo a apreciar pequeñas cosas que disfrutaba, obligadamente durante mi estancia en este limbo desesperante, por ejemplo, salía de la casa todas las mañanas silbando melodías de algunas canciones casi olvidadas, escuchadas en otro lugar, en otra vida imagino yo, una vida que no logro recordar. Entonces tome un lugar en particular para tratar de analizar estas pequeñas cosas que recordaba y lo hice mi santuario de reflexión. Era en el árbol de manzana donde mis pensamientos se reagrupaban y trataban de analizar de donde vengo, el porque de mi aparición en este lugar y si estaría pagando alguna clase de condena.
Todas las mañanas tomaba una manzana, me recostaba en el suelo y apoyando mi cabeza sobre el árbol con la mirada puesta en el cielo empezaba a divagar y ciento de imágenes y pensamiento sobre personas que abre conocido en otros tiempo rondaban mi cabeza, como pequeñas piezas de un rompecabezas gigante que no lograba descifrar.
La mayoría de las personas que aparecían en mi mente proyectándose como fashes, retumbando en mis neuronas, me dejaban una sensación de dolor y culpa que no podía explicar y pensé por un instante que a lo mejor esa era la respuesta, que estaría aquí en esta penitencia desolada para poder recapacitar sobre el daño provocado a personas que confiaban en mi, que me habrían brindado afecto alguna vez y no correspondí como debería.
Y esa sensación de culpa y tristeza vagaba en mi por varios días y volvían a invadirme cada vez que reposaba en mi santuario ya no de reflexión ahora de culpa y dolor.
Fue así que en el pasar del tiempo, por dios tanto tiempo, la soledad abrumadora, la culpa desconocida y la tristeza sin cura fueron consumiendo mi espíritu y mi mente quedando un ser carente de vida y felicidad.
Ya arto de mi existencia en este lugar lleve este pobre cuerpo desecho por el la depresión hacía las orillas del mar y lo deje caer al agua sin dudarlo.
Un fuerte golpe me despierta, sujeto mi cabeza con fuerza, siento un leve ardor y noto un pequeño corte en mi cabeza. Abro mis ojos moribundos y me encuentro entre unas rocas, esas que creaban la pequeña isla en medio de este escaso mar. Trato de ponerme de pie y mis ganas no me lo permiten, al menos logro arrodillarme y al hacerlo veo una gran roca con un agujero en el medio, a simple vista tiene el aspecto de un pozo quizás, me acerco lentamente dolorido por el golpe en mi cabeza y con mis ultimas fuerzas me trepo sobre esta piedra asomando mi cabeza de un solo envión. Y sinceramente quede mas perplejo que la primera vez que desperté en este páramo de soledad, miro hacia el fondo del pozo y el miedo oprime mi pecho dejándome sin habla y sin respiración, puedo ver que el cielo mismo pasa por el fondo del pozo, esto es una locura, ¿será una especie de ilusión?, es como si el pozo atravesara todo el planeta y viera el cielo de la otra mitad de este pequeño mundo, aun así desprendo una pequeña carcajada de locura al pensar por un momento en esta descabellada ironía, la de caer, pero caer sobre el cielo mismo.

4-La caída

¿como podría atravesar el planeta? Si yo no vi ningún pozo del otro lado de este mundo, no podía entender hacia donde conducía este abismo celestial, ya no resistía toda esta situación, mi mente enloquecida buscando respuesta hace años, mi pecho lleno de dolor y desesperación, mi cuerpo empieza a temblar, mis ojos lagrimean de frustración y repito en vos baja una y otra vez que ya no quiero estar aquí, no lo soporto! Dios no lo soporto! ¿Que es lo que quieres de mi? Y en la locura podía escuchar su risa burlándose de mi.
En este preciso momento todo mis pensamiento se reagrupan para planear el fin de esta situación y la tentación del suicidio me invade con su frialdad.
Ya no hay vuelta atrás, si el no quiere terminar con esta situación lo hare yo de una vez por todas y con mis ultimas fuerzas logro arrodillarme en el borde del pozo, abro mis ojos sollozos y veo nubes transitando debajo de el, entonces con un fuerte suspiro abandono toda esperanza de vida y me dejo caer hacia el cielo.
Siento el vació de la caída, mi corazón bombea sangre a mil por hora, el terror invade mi cuerpo y apretando los dientes y mis puños con fuerza voy tomando velocidad hacia el fondo del pozo, hacia el cielo, hacia lo inesperado. Voy llegando al fondo, el cielo se va abriendo paso y comienzo a ver una luz cada vez mas potente, mas radiante, mas incandescente y me enceguece por completo.
Mi ser despierta en una cálida oscuridad pero mis ojos aun cerrados y puedo escuchar unas voces suaves y pequeñas risas de felicidad aparentemente. Respiro poco a poco, puedo sentir un confort y un bien estar absoluto, una energía tremenda recorre todo mi ser, siento a mis pulmones respirar con tanta fluidez y mis ojos se van abriendo lentamente y otra vez esa luz molestándome pero esta vez se va dispersando, logro ver imágenes borrosas sobre mi que poco a poco van tomando forma y me percato que son personas, que están alrededor mío haciendo vigilia todo el tiempo, pendiente a cada mínimo movimiento. Con mis pensamientos ahora serenos reflexiono una vez mas y recuerdo por un instante toda la angustia vivida en ese planeta, toda la tristeza ocasionada por el abandono durante tantos años cumpliendo mi condena en ese limbo y una pequeña sonrisa brota en mi rostro y me pregunto ¿si fue una lección, acaso la eh aprendido? Y me respondo a mi mismo, ojala que si, porque creo que....... ¡eh vuelto a nacer!
Hernanrock18 de abril de 2009

1 Comentarios

  • Wim

    Me ha gustado tu relato. Me parece que haces una descripción interesante de un universo particular y transmites con destreza las emociones que deseas al escribir. Aparte de unos gazapos ortográficos, me parece que escribes muy bien.

    07/10/10 08:10

Más de Hernanrock

Chat