Declararse.

Es lo más dificil de este mundo. Trataré de empezar. Intentaré no acabar nunca. Todo nació... ¿Cómo decir cómo nació? Nació de la nada. Es magia, es arte. Me hacías reir, me atraias. Era ese algo especial de que en todo libro hablan y que no entiendes hasta que lo experimentas. Es el temblar por que te toque una mano y sonreir como si fueses tonta. Realmente, el amor atonta. Era el sentirme totalmente alcoholizada por el mero echo de compartir el mismo aire. Cuando me hablabas...Ai, cuando me hablabas. Vaya forma de enamorarme. Me sonreías, y yo tenía que bajar la mirada, para no abrazarte y no dejarte ir nunca. Recuerdo yo y recuerdas tú aquel pequeño detalle de ESE día que estabamos juntos, rodeados de gente, pero por primera vez, en NUESTRO mundo. Ese que creamos. Ese que tal día comenzamos a construír. Cuando me agarraste. Quise que no me soltases jamás. Y lo hiciste, aunque solo físicamente. Por que desde ese día, no somos más que un solo corazón que se amolda para latir para los dos.
¿Como decirte lo tan enamorada que me siento de ti? Para dormir me conformo con recordar lo que es que me agarres y me aprietes contra ti. Que me dejes apoyarme en el hueco de tu cuello y olerte. Huele a ti, huele a amor. Huele a algo que me hace vibrar por dentro, que me hace abrazarte más y más fuerte. Hasta que la muerte nos separe. Yo nunca he creído que el amor sea algo que dure eternamente. Pero gracias a ti no es que piense que sea eterno, si no que lo es más.
Cada beso. No lo entiendo. Son todos tan precisos, tan adecuados al momento. Los besos cortos para saludarme. Los suaves para tranquilizarme. Acorralándome al tiempo contra la pared para seducirme.
Cada vez que me lo haces. Nunca pensé que fuese así. Para el mundo es follar. Para mi es hacer el amor. Para mi es calentarnos mutuamente, con miradas, gestos, susurros. Con las manos, cadera contra contra cadera. En una cama, contra un arbol, en un banco, contra la pared, en un sofá. Todo, mientras sea contigo. A tu lado. Junto a ti.
Es ese momento en el que cada uno se va para su casa y nos miramos. Y nos rogamos que el otro no se vaya y quedarse así para siempre. Tanto si estamos a 3ºC como si estamos a 38ºC. Tanto en invierno como en verano. Tanto si llueve como si no.

Voy a amarte toda la vida