Recuerdos de una Vida.
Hemos tenido muchos problemas, problemas que vistos a estas alturas son problemas de críos, problemas típicos de la edad en donde uno no sabe ni lo que quiere. La primera vez que empezamos con esto yo misma no apostaba ni un duro por lo nuestro y con el tiempo me voy dando cuenta de que a pesar de todas las veces que hemos estado sin estar, de todas las broncas y pequeños roces, estamos hechos el uno para el otro. No es algo que diga yo, lo dice nuestra historia, ni tu ni yo nos hemos podido olvidar nunca el uno del otro, es como que cuando nos separábamos nos faltaba algo dentro. Hemos tenido momentos muy difíciles, momentos en que te hubiese matado, en los que te odiaba pero bien se sabe que amores que matan nunca mueren. A día de hoy puedo decir que estoy muy contenta de lo nuestro, de como has crecido, como has madurado, como me cuidas y me tratas y espero que lo que un día empezó nunca termine.
La última vez que viniste llorándome y diciéndome que querías volver conmigo y que esta vez iba a ser de verdad no supe que hacer, dude, te dije que me dejases tiempo...reconozco que tuve miedo sobre mi elección, no quería sufrir más, ya habían sido bastantes, pensé que no iba a tener sentido, que iba a ser como las dos anteriores pero escuché al corazón una vez mas jugandomelo todo, apostando por ti, me tiré al vacío como quien no puede ver, descubriendo que cuando menos lo esperas sucede.
Son cuatro felices años los que continuamos unidos de nuevo, escribiendo paso a paso nuestra larga historia, aquella que empezó una fría tarde de diciembre cuando decidiste que después de tanto tiempo hablando era momento de vernos y sentirnos más cerca. Éramos niños, niños que pensaban que podían con todo, que eramos mayores para enamorarnos aunque cometimos demasiados errores dada nuestra niñez. Errores que nos han ayudado a crecer, a conocernos a la perfección y a darnos cuenta de que aunque el mundo cambie, lo nuestro no cambia, lo nuestro permanece.
En su día me llamaron loca, loca por elegirte una vez más a pesar de todas las veces que nos habíamos separado pero lo que la gente no sabía es que nadie tuvo la culpa, fue así porque lo tuvo que ser y quizás sirvió para darnos cuenta de que lo nuestro era caminar juntos en la misma dirección. Para nosotros no fueron meses separados, en nuestra mente nos pensabamos a todas horas, nos soñábamos, deseábamos en encontrarnos en cualquier rincón y vernos otra vez.
A veces todavía no puedo creer como finalmente ha acabado todo tan bien, es algo a lo que llamo destino porque no todos los amores que se rompen pueden luego volver a reconstruirse por mucho que se intente, pero tú has sabido con cada detalle hacer que vuelva a confiar en ti, has sabido enamorarme cada día como lo hiciste la primera vez y has estado ahí en mis días de penumbra haciéndome bien que por muy pequeñito que sea el hueco el Sol siempre sale a iluminarte el día.
En estos cuatro años han sucedido cosas agradables, menos agradables y aun así tú siempre has estado ahí viviendo conmigo los momentos divertidos y siendo mi pilar fundamental cuando mi mundo se me desvanecía.
Solo puedo decir que gracias, muchas gracias por formar parte de mi vida, por convertirte en alguien indispensable para mi, por abrazarme por las noches y hacerme sentir que pase lo que pase tu siempre vas a seguir ahí. Nunca creí en el para siempre hasta que te conocí...
