Querido Miguelito
A través de estas líneas quiero manifestarte, el gran aprecio que siempre te tuvo Mafalda. Ella inculcó ese sentimiento en mí, como dos pupilas caminábamos cerca de la Torre Eiffel. Y soy una que siempre anhela "que siempre halla París". He viajado varias veces pero siempre tengo mis raices en América.
En verdad, nuestra amiga es fenomenal como dirían mis queridos amigos mexicanos, una chava a todo dar. Te cuento que cuando, dejé a Mafalda (y que coste SOY PESIMA en las despedidas) fui a mi México lindo y querido,__ espero algún día volver, porque el cine, la música, la literatura, es impresionante, además de su gente amena y fabulosa. En verdad, las noticias que llegan a mí de mis CHAVOS, no son los que quisiera actualmente. Pero todos los días, le envío gran cantidad de energía positiva porque realmente, LOS AMO.
Creo que ella, te debió hablar de mí. Nos parecemos tanto, multitudes de años, de ilusiones sin fin.
Pienso que te diría, que yo en esencia; me parezco tanto a ella. Pero nuestras infancias, fueron diferentes, ella en el país de Borges y sus espejos. .Esa Argentina de Alfonsina, de aquellas editoriales famosas. Es cierto, no es la misma.
Amigo, no sé si sabes que yo en un tiempo, fui muy huraña pero posteriormente, mi sangre prevaleció. Me consideré Ciudadana del Mundo, como Miranda, Bello, Rodríguez o Bolívar. Querido, ahora viene a mi mente mi amada Colombia, porque Venezuela es Colombia___ y Colombia es Venezuela.
Permanecí allí, cuando la violencia reinaba y yo no lo podía creer. La cuna de mi Gabo, adorado. Mis artistas, mi gente fenomenal. Estaba siendo golpeada inclementemente. Luego regresé a mi patria, Venezuela. Regalé un cuento fabuloso, a un niño que le esperaba un futuro oscuro; y lo hice mi familia, de Mafalda aprendí a pedir sus derechos y me hice madre.
Seguí utilizando como armas, las más poderosas; EL AMOR Y LA EDUCACION, para hacer nuestros pueblos grandes.Empleé incansablemente, la tiza y el pizarrón, en la Capital, en ciudades y pueblos. Repetía incansablemente, la voz del maestro "HAY QUE SEMBRAR EL PETROLEO" mi querido Uslar. Aquel que terminó sus días (según información que me llegó) diciendo "HE HECHO MUCHO POR VENEZUELA", sin duda, sabio, compatriota.
Viví la formulación e implantación de una nueva forma de vida_ no sé si por lo vivido antes_ no confíe mucho. Yo seguí, con mi familia, mis pupilos y el arte. Venezuela estaba cambiando y entonces recordé como siempre, a mi amiga Mafalda. Aquella de espíritu indómito, deseando ser libre y aprender siempre. Hoy que te escribo Miguelito _por previa iniciativa de ella_ en mi pecho hay una mezcla enrarecida de sentimientos. Los docentes hemos sido golpeados tantas veces.... que perdimos la cuenta. Pero también, veo con ojos terroríficos a aquellos maestros sin VOCACIÖN. Aquellos que solo escogieron esa profesión, por tener un título. Realmente, me duele pensar quién está educando las futuras generaciones. Es cierto, Japón salió de la Guerra, pero nosotros ¿con qué contamos?. Generalizando no tenemos como consigna, la base fundamental: RESPETO Y EDUCACION.
Sé que has leído mis líneas "locas" deseando ser una cibernauta actualizada, pero como secreto te digo que mi hijo es mejor en esas artes. Será que se me han sumado varias décadas o quizás me golpee fuertísimo los bajones de azúcar, porque ya no contamos con Celia, querido.ja,ja,ja.
Para no despedirme con malas noticias, te digo que Mafalda te adora como siempre y que eres único para ella. Yo sigo aquí con mis libros, mis recuerdos e inmortalizándolos aún más en el corazón de mi hijo. Quién siempre te quiere y te admira.
FLOR...
