“¡Mami, mami, no quiero ir a la escuela, no quiero ir a la escuela!” Mi pequeño corría por el pasillo de la casa desesperado, a voz en grito, con un llanto inconsolable, buscándome tembloroso porque, en un descuido, había encontrado abierta a su pequeño gran mundo la terrible ventana que puede ser en nuestros días una pantalla de televisión. ¿Qué vio allí que causara tal desasosiego en su tranquila y regalada vida de niño del primer mundo?

Escuelas donde ya no se aprende ni se enseña nada, salvo los restos de una matanza brutal y despiadada, donde los cadáveres sustituyen a los libros y la metralla dibuja páginas de muerte y devastación.

Escuelas que pasaron a ser refugios de miles de palestinos que huyen de un destino atroz, y que ahora se convierten en enormes morgues de cuerpos de niños reventados por el indecente y absoluto desprecio hacia cualquier semejante.

Escuelas que me hacen llorar lágrimas que ya no tengo, porque me he quedado seca de ver desfilar ante mis ojos cuerpos mutilados salvajemente, gritos desesperados de madres cargadas de hijos sin aliento, niños que, con rostros desencajados por un dolor ancestral que se les ha grabado en la mirada a fuego y muerte, están literalmente pegados a objetos que sustituyen a sus familiares, médicos derrotados incapaces ya de subsanar nada.

Escuelas, en fin, que son pasto del olor podrido de la muerte en directo que nos visita un día sí y otro también, aunque estemos a miles de quilómetros de este holocausto que el ejército israelí está cometiendo con un pueblo que ya no tiene escapatoria, ni escuela donde esconderse de esa Parca Cruel.

Juan Carlos Pérez García
(Maestro de escuela)

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3 Comentarios

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  Sandor

  Realmente es así..bello texto y un honor ser maestro de escuela...fueron con mo abuelo (maestro armero) y mi padre,los que mas me enseñaron y aunque ya no estén aqui quiero citar sus nombres:
  D. José Manuel Lobato y D.Ulpiano Aguirre.
  Un abrazo
  Carlos

  25/07/14 04:07

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  Jucapega1963

  Gracias por tus palabras, Sandor. Yo también creo en los maestros y la educación como posibilidades de un futuro mejor. Saludos.
  

  26/07/14 09:07

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  Sandor

  Sí,los maestros son los portadores de la salvación. Los padres,la sociedad entera querido amigo,tiene esa ceguera que impide que se den cuenta de ello.
  Un abrazo,Maestro. .que palabra mas bella.!
  Carlos

  26/07/14 01:07