Dedicado con todo mi cariño a los poderosos que gobiernan y a los políticos que les sirven, a una maldad que ni se nombra.

Huyen las sombras
buscando cobijo
de la maldad
que ni se nombra.

Roen y roen
el mismo hueso
descarnado
hienas y buitres
en un exceso,
desafiantes
e infatuados.

Carroña para ellos,
vísceras de Prometeo
una y otra vez comidas.
Ponzoña sus dientes
destilan,
disputan insaciables
los restos.

No hay luz,
no hay sombras,
solo una maldad,
vestida de etiqueta,
que ni se nombra.

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3 Comentarios

• 

  Indigo

  Hay un mundo dirigido por esos seres y tienen su rebaño, sin embargo, existe otro mundo que jamás volverá a creerles. Desde hace muuuucho soy del segundo grupo.
  Saludos Jucatohi.

  29/11/12 12:11

• 

  Abyssos

  Me indentifico totalmente con la opinión aquí expresada. Algunos intentan convencerme de que el Diablo no existe, pero si lo "veo" a diario regodeandose de la miseria en la que mantiene sumido al pueblo.

  29/11/12 06:11

• 

  Jucatohi

  Muchas gracias amigos.

  01/02/14 06:02