Tres Historias - Capítulo 3 -
la Huida, El Descubrimiento y
El Plan
Aquel mecha enorme era pavoroso. Su rugido había enmudecido a todo el mundo salvo a las sirenas de los vehículos de emergencia. Tras unas sacudidas débiles el muchacho que se "tragó" el camión-grua aparecio por las partes bajas del mecha. Si mis ojos no me traicionaban, estaba ascendiendo por el mecha movido por los extraños engranajes y estructuras dobladas que componían el mecha. Una Capsula salio del pecho de aquel mosuntro y introdujo al joven en él. La última imagen de él fue creyendo que estaba inconsciente. Más tarde me daría cuanta de que me equivocaba. Antes de que la policia o cualquier presente pudiera evitarlo, el mecha pegó un brinco y empezó a andar por el parque del río. A cada paso que daba, la tierra parecía ceder poco a poco, a sus pies.
Abandonado el CET (con miles de alertas acerca de un mounstro enorme) Yuri Axio y el secuestrador fueron a paso ligero al hospital de San Eduardo. Al llegar a la puerta exterior, El desconocido volvio a desaparecer pero Yuri intuyó que andaba a sus espaldas "invisible" para todos.
- Avanzar hasta la sección de Administración. No mireis a nadie. Aún conservo la pistola
Mientras se dirigian a su destino Axio empezaba a intrigarse. Si bien no era un chico aparentemente normal, tampoco creía que hubiera nacido bajo una mala estrella. Sus padres fallecieron al poco de haber nacido él y unos padres adoptivos le acogieron junto a sus dos hijos. Crecío siendo un chico tímido pero sobresaliente. Hasta el momento que se dedico a la Proteccio civil. Algo en su interiror le llamaba a hacerlo.
- Delante de la puerta de Admisión - dijo el viejo poco antes de llegar a ella - hay un pasillo a la derecha. Cojerlo. Vamos
Yuri estaba exhasperada. Los papeles que estaba leyendo eran del departamento de Seguridad Ciudadana. por lo visto los servicios secretos habían relacionado varios asesinatos con un doctor muerto en extrañas circustancias. A pesar de la situacion en la que estaba, estaría más tranquila si no fuera porque en los papeles que leía antes, Axio Tipoca estuviera citado varias ocasiones.
- Bien - dijo el viejo ante tres puertas - Hemos llegado. Chico, abre la del medio
- Pero...Esta cerrada con cadenas
Y de hecho lo estaba. Además una señal de riesgo biológico advertía de un peligro inminente. A Yuri le sorprendio que aquello estuviera solo dando un par de requiebros por el pasillo principal de Administración. Algo tan peligroso.
Axio acercó lentamente sus manos a la barra de apertura de aquella puerta candada. Justo al tocarla, la cadena con la puerta se fue desvaneciendo poco a poco. Una luz cego a todos los prensentes. ¿Que descubrimiento era aquel?
Una sombra corpórea con un sombrero oscuro sobresaltó al desconocido en el bar.
- Me han dicho que vienes de una buena familia...
Aquela sombra ¿hablaba? Miro a su madre y ella, con una sonrisa de malicia, asintio con su cabeza.
-Sí...
- Verás. Hace mucho tiempo que Tikonderosa lleva evolucionando. Demasiado para los míos...
"¿Los suyos?" penso aquel hombre
- No estamos contentos con un progreso exponencial de vuestra raza. Creemos en la nauraleza del equilibrio. El eqúanimus...
- ¿Eqúanimus?
- Exacto. En el equilibrio de las cosas. Muchos ya han abandonado esta creencia a favor de la ciencia. Ahora la ciencia es dios yu eso es como si nos insultaran. como una ofensa se tratase...
- ¿Que desean ustedes?
- Que el equilibrio vuelva a Tikonderosa. Solo eso
- ¿Y que "chanchuyo" hay que hacer para eso?
Aquella sombra sonrio para sus adentros.
"El desmerado orgullo de esta madre ha sido productivo. Este hombre es idela para ser nuestro catalizador para gobernar de nuevo el mundo" pensó la sombra
