Y Aparece él...
Y de repente alguien que no pensabas que pudiera existir te agarra fuerte la mirada y sostiene un contigo entre sus labios. Entonces solo podía estar segura de saber que siempre querría tenerte muy cerca, segura de saber echarte de menos siempre que fuera a volver a verte. Y quise decir adiós a los límites y a los miedos que aunque siempre presentes, contigo podían ignorarse, olvidarme de los disfraces y de las trampas. Aprender de tus detalles, todos esos que dices que no tienes. Apreciar tu mano en mi cintura o cuando me besas en la frente y yo solo podría darte las gracias, y nada más, porque no sería capaz de encontrar las palabras exactas que estuvieran a tu altura. A la altura de esos ojos que me ven cuando me miran y que no quiero que dejen de hacerlo nunca. Luego, abrazada a tu espalda donde sólo importa el olor de tu pelo, tu piel, solo importas tú y te ríes y yo sonrío porque me encanta que te rías y poder verlo. Cuando no estas aquí, cuando no estas conmigo cambiaría cualquier cosas si pudiera, por tenerte a mi lado, pero no me importa tanto si nunca dejas de abrazarme. No me importa esperar (nos) si el final siempre es volverte a verte
no podría encontrar, aunque buscara, nada mejor que eso, o tal vez sí, puede que contigo sea todo buenos días , pero también quiero que me muestres tus mejores noches. Y entonces, luego, sin más, me dices que me quieres, y entiendo que sí, que lo mejor de todo es que yo a ti ,también.
