Curiosidad
Hay cosas que el ser humano jamás debería saber, secretos que se ocultan en un manto de sombras colocado hay por una conciencia superior la cual quiere librarnos de conocimientos ocultos que provocarían el mayor de los daños en el hombre mas fuerte, y los pocos que se atreven a levantar ese manto no son mas que presas de una locura la cual devora cualquier pequeño resto de su conciencia.
Los hechos que me han condenado a tal infierno mental, no son menos que fantásticos, sacados de las historias mas escalofriantes de Poe y Lovecraft, como si mi mente me arrinconara a la locura entre mas conocimientos se iban haciendo uno, y entre mas secretos de esa oscura manta se iban revelando y yo terminaba presa de ellos.
Todo comenzó una tarde, poco fuera de lo común, me la pasaba leyendo diferentes artículos de noticias antiguas relacionadas con antiguas figuras históricas, sus vidas eran apasionantes y se tomaban la mayor parte de la mía, y desvelar los secretos del pasado es una de las cosas que creaba esa tensión en mi pecho y me hacia sentir una fuerte emoción. Pocas veces me detenía de mi pequeña labor, podía pasar día y noche entre viejos documentos y sitios web leyendo sobre cualquier pequeño hecho antiguo, el pasado es mucho mas interesante y esperanzador que el futuro para mi, la vida me ha hecho algo cínico, y es algo que no puedo negar.
Me encontraba leyendo sobre mi ciudad, me encantaba leer cualquier pequeña historia, corriente o fantástica, ocurrida en las calles por las que me críe y a pesar de poseer una historia tan convencional, la encontraba fascinante, y algo que disfrutaba mas que leer sobre estos hechos, era poder recorrer las mismas calles en las que habían ocurrido, y poder ver todos esos escenarios del pasado tomar forma frente a mis ojos como si un portal hacia el pasado se abriera y me arrastrara con una fuerza demoníaca a el.
Este día fue algo diferente, ya que si bien siempre leía noticias de diferentes ámbitos, esta en especial me llamo la atención a tal grado de que fue lo único que tuve en mente durante unos días, y que sin lugar a dudas quería conocer mas a fondo, fue publicada en el año 1954 según citaba el documento, y hablaba acerca de una extraña masacre en la cual 8 jóvenes fueron asesinados brutalmente por un atacante desconocido, si bien suena como algo trágico, lo que llamo la atención de esta noticia fue el hecho de que los jóvenes tenían "marcas circulares que recorren sus abdómenes", ¿porque habrían de presentar tales marcas? ¿ con que motivo un criminal los lastimaría así?, es difícil pensar en motivos lógicos para todo esto, pero por algún motivo el cual hoy me cuestiono, me devoro una enorme curiosidad por conocer mas acerca de este extraño y grotesco crimen.
A la primera hora del siguiente lunes me aventure a el extraño escenario de tal cruel y fuera de lo común ataque, el cual si bien quedaba cerca de donde yo habitaba, tenia que caminar cerca de 1 hora para poder llegar, era en un punto muy especifico del Cerro Quitasol donde se puede ver un pequeño camino del cual tuve que desviarme durante un largo recorrido para llegar a el lugar en el cual había ocurrido este sádico crimen.
Estaba en medio de la nada, era un lugar olvidado por la civilización, solo podían verse árboles a donde alcanzaba la vista, y no había nada de sobrenatural en el ambiente, lo cual estuvo apunto de enviarme a casa de no ser por una visión que me helo la sangre y me hizo temblar, era una extraña marca de circulo en uno de los árboles, la cual no se notaba a simple vista, de no ser por que me acerque lo suficiente hizo habría podido ver el detalle con el que estaba hecha, en ese momento supe que estaba en el lugar correcto, y esto solo me motivo a seguir buscando mas estas curiosas marcas.
Pasaron horas y el calor se hacia insoportable, pero eso no me detenía, estaba en un frenesí, poseído por una curiosidad mas grande que cualquier otro evento que ocurriera en mi vida, deseando encontrar mas de estas misteriosas marcas, y saber quien o que, las había hecho. Al pasar del día fueron apareciendo mas, una tras otra y cada vez mas visibles, como si quien las hubiera hecho deseara ser encontrado, como si ese ser quisiera dirigir a quien viera su sello a una trampa de indiscutible muerte a la cual yo había caído sin duda alguna.
Al final del recorrido de estos círculos, logre dar con una pequeña fosa cubierta por hojas y un aroma putrefacto, dominado por mi propia indagación termine por levantar las hojas solo para revelar un escenario el cual ha sido el protagonista de mis pesadillas hasta el día de hoy. En la fosa habían cerca de diez cadáveres putrefactos con las extrañas marcas de círculos en la piel, pero eso no es lo que hizo todo tan aterrador, por el contrario, lo que causo todo mi temor actual el cual me hace temblar a cada momento fue el hecho de que esos cuerpos demostraban no haber muerto hacia mas de una semana, ya que sus ropas eran de esta época, y sus cuerpos a pesar de malolientes no estaban completamente descompuestos.
Un escalofrío me recorrió de pies a cabeza y un inmenso deseo de correr de hay se apodero de mi, pero mis piernas temblaban y solo podía dar torpes pasos hacia atrás intentando no caer presa del pánico, lo cual parecía imposible, y al cabo de treinta minutos en ese oscuro bosque y cerca del anochecer pude levantarme y comenzar mi recorrido al lugar de donde había venido, pero Dios no quería que terminara así, como si fuera una maldición divina, fue mandándome poco a poco al pasado y vivir esa masacre en vida, eso lo supe al ver esa criatura extraña que paso frente a mi, su similitud con una persona era increíble, la cual seria total de no ser por el hecho de no tener rostro alguno, solo era una figura desnuda sin sexo caminando sin rostro por entre los árboles, y cuya aparición de no ser porque fue muchos metros lejos de mi me habría hecho correr inútilmente.
Note que iba por el camino que hacia ya un rato hacia recorrido, de camino a la fosa, y Dios sabe que no quiero saber que ocurrió hay, solo se que ese ser traído de las profundidades del infierno, habría reclamado mi vida al igual que las de todas esas personas, y que sin lugar a dudas, habían muchas mas en ese oscuro cerro, y prefiero no descubrirlo.
Hasta el día de hoy sigo teniendo la imagen de ese horrible ser en mi mente, y sigo con la misma sensación de escalofrió en mi espalda, el mismo terror en mi mente descrito por el sonido de sus pasos, aun lloro en las noches al recordar ese horrible día que marco mi existencia hasta el día de hoy, y aun recuerdo ese horrible eco de risas en la lejanía que recorría el bosque mientras daba mis últimos pasos por ese lugar maldito.
