Me has visto ser feliz, entre tus brazos. Te he visto amar y huir, como un ladron que se descuida. Me quedo sin vivir de no tenerte, e intento ser valiente y más fuerte cuando imagino que otros labios te disfrazan de pasión. Pero yo sigo enamorada de ti; aunque otros brazos calmen mis deseos en cada beso sin querer te buscaré. Sigo enamorada, aunque haya otro que me encienda el alma. Ese es el secreto que llevo tan dentro y que en el fondo me desnuda la verdad.
Entre el amor y el odio hay solo un paso; entre la verdad y el engaño hay un oceano de dudas. Me ahogo en soledad en mis naufragios, me aferro a tu recuerdo y me ilusiono aunque te pierdo. Cada noche pienso en ti aunque me haga daño y sé que se nos olvidaran las palabras, las promesas que bordamos y sé que se eclipsaron nuestros sueños.
