En la estación invernal de su vida,
Observo y ahí está ella,
se ha convertido en una mujer egoista,manipuladora,
pero aun así,y apesar de que ha dejado sus sueños atrás,
no renuncia a ver salir el sol,
No renuncia a vivir ese gran amor,ese del que la arrancaron,porque era prohibido,.
ahí,con todo el vagaje de su existencia,se rinde ante el dolor y la enfermedad,
ahí en su invierno otoñal,se esconde detrás de una barrera, para seguir peleando contra aquella bestia que le hizo tanto daño.
No vio la ternura en él, solo las caricias torpes, brutales que le prodigaba.
El verdugo a muerto!,pero ella no se ha enterado, sigue sumida en su quebranto.
¿Hasta cuando seguira con sus cadenas invisibles?,
¿Hasta cuando el balsamo del amor sanra sus heridas?
una vida con talento,pero frustrada,sin frutos más que de tristezas y sollozos.
Vivie!,no te pierdas la bellaza de la nieve en tu invierno frio.

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10 Comentarios

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  Serge

  Leonora:
  "¿Hasta cuando seguira con sus cadenas invisibles?"
  "¡Vive!, no te pierdas la belleza de la nieve en tu invierno frio".
  
  Me encanto.
  
  Un abrazo.
  
  Sergio.
  

  26/04/10 04:04

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  Exequiel

  muy bonito. es dificil para mi comentar cuando un poema me llega al alma y el eco del silencio habla. espero me comprendas. saludos

  26/04/10 11:04

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  Polaris

  Precioso, como tú.
  Pol.

  26/04/10 11:04

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  Leonora

  Sergio,eres muy amable.
  Gracias por visitarme.

  28/04/10 10:04

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  Leonora

  Exequiel,que bueno "verte por aquí".
  Gracias por comentarme.

  28/04/10 10:04

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  Leonora

  Pol,es todo un privilegio que te pases y además me comentes.
  Mil gracias.

  28/04/10 10:04

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  Carlo

  que maravilla colombiana tenia mucho tiempo que no me robabas asi las palabras te mando un gran beso.
  
  ERES MAGIA
  

  29/04/10 03:04

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  Leonora

  Carlo,mil gracias,siempre tan amable.
  Un abrazo muy especial.

  30/04/10 09:04

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  Abyssos

  A veces esas cadenas que antes parecían bien visibles, se tornan en fantasmales ataduras que de una u otra forma te mantienen sumido en el abismo al que te llevaron las decepciones amargas, pero hay que apretar los dientes y tirar hasta que sus eslabones cedan… tienen que ceder.
  
  En hora buena, un escrito abrumador que a la vez es denota nuevos bríos. Animo.

  15/10/10 05:10

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  Leonora

  ABYSSOS,es un honor tenerte por aquí.
  Mil gracias.

  18/10/10 11:10