Las palabras, las ideas, los conocimientos
son como la natura de las semillas,
como y donde las siembras,
dan frutos o se pudren, se apagan o brillan.
Las palabras son creación como
la utopia en un discurso extasiado de emoción,
conocen verdades, mentiras y todos los secretos
del sentimiento y la razón.
Las palabras son como
la melodía y armonía de la música,
que ha tonalidad, ruptura, unión
te entregan su existencia pura.
Pero también han de saber de las palabras
que hay sin aliento, templadas de egoísmo,
inventadas por gente que perdió el camino de su ¡filos!
bajo el azar del pensamiento y sus abismos.
Y que hay otras, milagrosas e infinitas
eternas e inmensas como el día,
creadas por los pueblos
Bajo la historia de sus cielos,
Que como arte están
para alumbrar la vida de los críos.
También están las máximas del arte,
palabras colmas de sensación
como la complejidad del universo,
inventadas por los poetas esculpidos desde el corazón ,
palabras que pierden originalidad del creador,
para ganar eternidad en el alma, la vida del pueblo.
