SuperaciÓn
SUPERACIÓN
Hola, ¿cómo te llamas? Me llamo Alberto, doctor. Yo soy Ángel, ¿cómo te encuentras? No muy bien. Me duele la barriga, en el lado derecho. Bien, mientras la enfermeras te preparan para operarte de apéndice, ¿te puedo hacer una pregunta? Claro, doctor. ¿Eres bueno estudiando? Pues no, señor, tengo suspenso en casi todas las asignatura. ¿Qué es lo que más te gusta? Preguntó el doctor. Jugar al futbol. Mis padres se enfadan mucho, pero yo no quiero estudiar. ¿Qué vas a hacer de mayor? Aún no lo sé, porque como dicen que no valgo para estudiar&Creo que te has acomodado a llevar ese rol, pero yo me niego categóricamente a aceptarlo, pues estoy convencido que tú puedes ser lo que quieras. Te voy a contar mi historia, dice el doctor. Soy el pequeño de tres hermanos. Mi hermano Antonio, el mayor, es albañil como mi padre; mi hermano Jesús es electricista, y mi hermana Marta trabaja en un hotel de recepcionista. Cuando tenía 14 años los estudios no me iban muy bien, como te pasa a ti, y mis padres siempre se enojaban con mis notas. Un día suspendí un examen de matemáticas y, como de costumbre pensé, una regañina y poco más. Pero no fue así, mi padre me cogió del pecho y me dijo: Ángel, jamás serás nada en la vida. Miré entonces a mi madre y ella agachó la cabeza continuando con sus tareas. Ese día algo cambió en mí, nunca mi padre me había hablado de esa manera. Cuando era más pequeño escuchaba a mis padres de decir: Ángel es muy torpe, no vamos a hacer carrera con él, al final me lo tendré que llevar a la obra conmigo. Aquel día mi padre se fue muy triste, y nunca más me dijo nada. Ese día me fui a mi lugar de pensar. Sentado en el parque y cabizbajo, se acercó un hombre mayor y me dijo: Muchacho, ¿puedo sentarme a tu lado?, yo le dije que si, que por supuesto. ¿Te puedo preguntar algo, si no tienes inconveniente?¿Por qué estás tan triste? Porque no ve va bien en el colegio y, me he dado cuenta que he decepcionado a mis padres. ¿Qué te gustaría hacer cuando seas de mayor? Pues aún no lo sé, pero algo que tenga que ver con ayudar a la gente. Esa es muy buena elección, pero debes pensar que solo tú puedes hacerlo, y no otra persona. Te voy a explicar algo, puedes llegar a hacer lo que quiera, pero siempre debes creer en ti. Para lograr aquello que te propongas, y aunque lo que tengas que estudiar, no tenga ninguna relación con ello, debes empezar primero por ahí, pues es lo más pesado para ti. Ahora ve a casa, ponte a estudiar pensando que en ello está tu futuro. El hombre se levanto y se fue sin más. Me levante, me dirigí a casa, y allí en el salón, les dije a mis padres que este sería mi último suspenso y que la próximo noticia que tendrían sería la de mi graduación en la universidad. Trabajé durante mucho tiempo, tal y como dijo ese hombre al que nunca llegué a ver más. Había muchas materias por estudiar, algunas no me gustaban y nadan tenían que ver con mi carrera, pero había que superarlas, era necesario. A pesar de todo, nunca apostaron por mí, no me creían. Finalmente, me gradué en Medicina, y me especialicé en cirugía, y según dicen, de los mejores del país. Todo esto lo cuento, porque de pequeño, como no iba bien en el colegio me llevaron a varios psicólogos para valorarme, ya que mi rendimiento era bastante malo. Pasé mucho para llegar a ser lo que soy. Alberto, tú también puedes hacerlo, sólo debes creer que sí puedes, y sobre todo, trabajar muy duro. No sé, doctor, todos dicen que no valgo. El valer o no valer solo lo decides tú. Piénsalo. Así lo haré, muchas gracias, doctor.
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Manuelfajardo
Hola a todos, estos escritos están hechos con el corazón buscando que el mensaje sea lo más directo posible para que no olvidemos las cosas tan maravillosa que la vida nos ofrece, espero os guste.
01/03/17 10:03
