A Ti Mismo
Hace ya varios días que me siento así. El porque, como siempre, no lo sé. Estoy cansada, sin motivación y simplemente con un peso encima con el que ya no puedo más. Necesito llorar, pero las noches de llanto parecen no ser suficientes. El tabaco también parecía una buena opción pero ni uno, ni dos, ni tres cigarrillos parecen ser suficientes. ¿Dormir durante años? Ojalá pero eso dudo también que fuera suficiente.
La monotonía eso si ayuda, pero ayuda a todo lo contrario, a hacer sentirme como una mierda. Cada día hacer lo mismo, como una maquina programada, sin ninguna emoción u opinión al respecto. Sin poder cambiarlo y todo esto, ¿para qué? El futuro parece ser siempre la respuesta. Pero, ¿por qué preocuparnos de ser felices mañana si es hoy cuando no lo somos?
Yo no sé vosotros pero para hacer las cosas sin más, sin emoción, es mejor parar, darse un respiro encontrar eso que te ha dejado por un momento y recuperarlo.
Aunque evidentemente no puedes hacer nada. Nada. En eso se acaba resumiendo todo. No tienes ganas de nada, no quieres hacer nada y nada parecer ser suficiente para sentir algo, excepto ese vacío que por mucho que se intente, siempre está.
Estoy harta de tener que preocuparme por el futuro en vez de darme un respiro en el ahora. Porque es necesario. Porque con esto no se puede seguir. Porque no quiero estar en la misma mierda de antes. Porque si, la vida es una puta mierda pero y ¿qué?
Y estoy harta de sentir que siempre soy yo quien la caga y quien siempre se tiene que preocupar cuando a los demás les da igual lo que te pase. Tener que ser tu quien está siempre pendiente de todos mientras que nadie lo esta de ti. Tener que pensar que al menos esa persona si va a estar pero que luego es ilusión más que realidad, porque luego te das cuenta de que no hay nadie a quien a decir: gracias por estar ahí excepto a ti mismo. Y eso, aunque parezca bonito, también duele.
