Delirio profundo reflejan mis sentimientos,
el tiempo hace preso mis deseos,
a palpitos cercanos a tu ser,
que alientan a pocos coqueteos.
Sufren los latidos colgados al recuerdo,
que rompen distancias hacia tí, siento,
que finjen estar muertos, pero están moribundos
a falta de tu sangre de sentimiento.
No era laberinto encontrar mi corazón,
no era desvelo, saber que yo te amaba,
quizás a veces caricias tardías funcionan,
certeras que llegan a la chica con quien soñaba.
Y fueron reflejo de tu voz,
envolviendo mi soplo de llanto,
que inundan un rincón, solo me acercan a tí,
te doy un toque y me adelanto.
Sobrios mis recuerdos llegando a tus recuerdos,
ven a mi ser resusitando nuestro amor,
cobijan nuestras almas y clavan minutos,
que surcan nuestra piel con clamor.
Y veo cenizas quemando mi corazón,
pues arde con solo verte a la distancia,
presagia un loco futuro de besos robados a tu boca,
pero el tiempo los aleja como ignorancia.
Mira mis latidos, solo sientes,
como arde , tu piel al sentirme ,
estando separados a viejos latidos,
que rozan pidiendo amor antes de irme.
No lo sé, pues antes de decir: te amo,
ya sabes que toco tu alma para demostrarlo,
con solo estar contigo, como petalos de flor,
que va cayendo al no encontrarlo.
Mis reflejos son capricho, mirando tu reflejo,
pues aunque no lo notes, mis ojos brillan,
al sentir que la reina de los latidos existe,
respira en mis sueños y mis latidos callan.
(Julio 2011)
