Y Entonces, Llorarás.
Ya nada es lo mismo, se que estás pasando por un mal momento, pero sabes que yo también necesito tu apoyo, no para nada en especial sino para seguir con mi vida. Te necesito a mi lado, mimandome como solo tú sabes hacerlo, comiéndome a besos, animándome cuando estoy mal, haciendo lo imposible por verme aunque sean cinco minutos, recibiéndome con una sonrisa de oreja a oreja.
Pero últimamente no eres el mismo, no se si ya no me quieres tanto o no tienes tiempo para mi. Entiendo tu situación perfectamente, pero yo estoy aquí, y te necesito, pero como sigas así, voy a tener que hacer algo para dejar de necesitarte. Porque tú no sabes lo mal que lo paso echándote de menos y los pocos ratos que te veo, ya no eres el mismo. Ahora si me rayo o lo paso mal, te enfadas conmigo porque dices que estoy todo el día igual, amargada, cuando antes si me pasaba algo perdías el culo por sacarme una sonrisa, ahora te desquicias y me pones mala cara. Tengo que rogar para verte y cuando te veo, hay veces que ni caso me haces.
¿Y yo qué hago en todo esto? Rayarme como una gilipollas y esforzándome porque esta relación de tanto tiempo no se vaya a la mierda por un bache, dándolo todo de mi parte, diciéndote que te quiero a todas horas, cosa que tu ya ni siquiera haces, sigo intentado estar como antes, pero ¿sabes cariño? hasta la persona más enamorada se termina cansando, así que date cuenta, porque a lo mejor cuando quieras volver a estar como antes, ya es demasiado tarde, ya he tomado una decisión, y entonces, entonces te arrepentirás de haber estado comportándote como lo haces.
