Tengo un miedo que se asemeja a no saber nadar
no me deja decidir por mí mismo
es mi doble alma conciencia de mi conciencia,
le causa temor a mi temor.
No puedo desprenderme de él
acecha la tierra que piso llena de moho mi felicidad,
y aunque a veces he creído que ha muerto
es porque está vacacionando en el ruido de mis sueños.
Es un asentamiento de cristales muertos
su transparencia se asemeja a los ríos desidiosos
atravezados por venas polvorientas,
caudal extendido por la tierra en surcos
por una naturaleza de carácter abierto.
Es debido que te presentes en el anonimato
saludando cordialmente al público sin público,
tú alteras mi sentido común de pertenencia
despojándome,
me fragmentas como una quebradura concurrida,
vuelves anacrónico al tiempo, hipocondricaco.
Fatigoso me dirigo a la huída de ti
por tus redes negras y prodigiosas me escabullo
redes como túneles aplanados,
pienso que me duelen las pies por caminar
y aún la luz no hace vista,
estás al final,
como una lámpara colgada e la entrada.
Araña de veneno siempre virgen en mí
pones tus uñas peludas en mis ojos,
quieres que sienta tu seguridad arrinconada,
tu corazón se eriza de sangre altiva
rebajas mis intenciones,
las manos se vuelven ciegas es su tacto
perdidas en si mismo encienden velas,
pero se queman las cortinas
el fuego se vuelve vicioso. No queda nada.
De tu unvierso voraz no conozco ni su nombre
pero igual resbalo, soy absorbido
me dejo arrastrar sin defenderme,
los puntos débiles están ocultos en tu alma
donde ni siquiera tu entras,
allí donde todas las llaves son erradas.
Sabes,
capaz no seré de desafiarte
pues prefierro bordear otras costas,
tus costras están sobre el mar como algas duras
flotantes sobre mi cuerpo hinchado de sal,
inpidiéndome mover, curtiendo la piel;
Sabes,
A diario delirio con enterrarte vivo
sin que la tumba se devuelva a mi cara
y me atrape con su sistema de olvido,
aislándome,
planeo que me dejes en paz
sin alas pero en paz,
con la ropa rajada pero necesario para la paz
con un beso de ella sin que te lo lleves,
promiscuo de dolores ajenos, ladrón
blasfemo de existencia:
Me tienes otra vez frágil.
Dolor.. se palpa dolor en cada estrofa...
El desamor lleva a ser fr?gil, la vida....
Gracias por compartirlo, a pesar del dolor es muy bello.
Felicidades, saludos
