Ante los humanos desengaños
y la fragilidad y el miedo de los hombres,

me diste la gratuíta recompensa del viento
y la rotunda fortaleza de lo bello.

Ante todo cuanto en mi axfisiante micromundo
me empequeñece y desconsuela,
obtengo el triunfo final de La Vida.

Nunca más mi alma estará sola
si tan solo aprende a mirar un poquito,
un poquito más allá.

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2 Comentarios

• 

  Polaris

  Hermoso poema que no entiendo porque no es comentado.
  Pol.

  16/04/17 08:04

• 

  Paulitinamente

  Te agradezco sinceramente el comentario amigo Polaris . Sin embargo creo que ya tú sabes que no se puede entender y valorar lo que no se ha vivido intensamente . Hay que pasar a tope por ello para emocionarse con la esperanza de lo intangible .
  Creo que también tú sabes que a un poeta que trata de ser auténtico le ha de bastar la propia fuerza que de dentro le brota como todo halago y recompensa .
  Repito las gracias y un saludo muy cordial .
  

  16/04/17 10:04