Yo no entiendo, no he entendido nunca. Si estabas tirándole piedritas al techo, yo llegaba tarde y las juntaba y las contaba y me acordaba de las cosas que hablábamos y los lugares por donde caminábamos y después lloraba. Pero siempre llegaba tarde.
Es tu corazón el que esta frio, no sé si te lo consumiste, no sé qué consumiste, te quemaste, te apagaste, TE consumiste, y si& así no podes dejar entrar nada, tu puerta es muy chiquita y para mí, está cerrada para siempre. No entiendo porque afirmas que me esperas, que me buscas, si hace un montón que vas corriendo en la dirección contraria, pero tirándome hologramas para confundirme, para que sea yo la que nunca entienda nada.
Ojala pudiera también congelar el mío, y abandonar de una vez la nada que habita en mi panza, y que tus piedritas no sean tan pesadas.
Sigo sin entender, y vos no perteneces a ningún mundo y yo no puedo ser una persona. No te creo nada. No queres que te invite a nada, y como no entiendo nada, además de todo, nunca voy a tener el fuego suficiente para que tu alma pueda consumirse.

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