Sumergirse en la burla,
perverso tu desprecio que como llaga cala
por fría te conviertes en cruel
impresionado mi desdén se revela,
evita y rechaza tus manos,
esquiva tus miradas
que son solo lastimas de treguas espontaneas
tu me enseñaste a despreciar, pero rehuyo
Quisiera herirte tanto mas que tú
ser amargo y agrio
para que tus palabras sean rezos y suplicas
para que mis hechizos y conjuros
censuren tus congojas
lograr tus lamentos y no me llene esto de culpa
pretendo cumplir mi voluntad en ti
llenarme de protagonismo
pero nada, te necesito
me enseñaste a necesitarte
a soportar las ásperas espinas
a prenderme en fuego con solo pensarte
a propagar tu miel como droga profana que reconforta.
pero cansado de estar sumergido en la nada
entendí al fin la agonía mia
doy cuenta que huiste antes del recuento
tan solo deseabas que mitigara tus culpas con mi desprecio
pero como despreciarte si eso no me nace.
aunque tu me enseñaste.
Claro que no te sale el despreciar a nadie Rotter. Tu no eres así.
Estoy segura de que tu amada te sigue queriendo como siempre y que además es correspondida por ti.
Porque eres todo corazón.
Un abrazo grande.
