Estoy aquí. Todavía puedo ver esa luz con olor a pólvora en el horizonte de la victoria. Aquel horizonte que esta cargado de sueños y esperanzas rotas que murieron ahí, que murieron con el paso de los días mientras la vida luchaba por sobrevivir, en ese horizonte de la victoria perdida...
Estoy aqui, en este lugar que está lleno de sangre y partes de cuerpos por doquier, lo sé, puedo verlo desde aquí. Desde este sitio en el que estoy parado, puedo ver ese horizonte de muerte y percibir ese olor tan putrefacto que debilita mi olfato.
Hemos ganado la batalla, obtuvimos la victoria, sí, pero que vamos a hacer con ella si ya no tenemos a nadie con quien compartirla. Todos quedaron en ese horizonte de muerte.
La victoria conquistada fue perdida, nos acabamos unos con otros luchando por algo, un cometido, tal vez un ideal que con el paso de la batalla se nos olvida y terminamos luchando por luchar.
Ahora, ya no estoy ahí, ya no puedo ver esa luz con olor a pólvora en el horizonte de la victoria perdida.
Tal vez, ahora sí, descanse un poco, sólo un poco, para que mis manos puedan tocar los rostros de mi familia, por los que me inicié en esta lucha

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1 Comentarios

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  Polaris

  Un día alguien me dijo que morir por una idea es estúpido, pero siempre es mejor que morir de amor, por que eso lo es aun más. El amor no existe, solo es una pequeña escusa para no destruirnos, lo malo es que nadie ha inventado una mejor, ni tampoco un ideal porque no se tenga que luchar.
  
  Somo así, nos pegamos un tiro y luego inventamos la cirugía para curarnos, humanidad y humanos, tal vez sea eso lo que nos hace interesantes, que somos incomprensible.
  
  Pol.

  21/12/14 12:12