A mi Abuela.
Hola abuela. Hace ya tiempo que no hablo contigo, es cierto, pero se que tú estás ahí y seguramente sepas un poco como me va. Pero, de todas formas, quiero contártelo.
No recuerdo muy bien que maldito día te fuiste, solo se que fue en octubre del año anterior a mi comunión. Tendría yo unos ocho años o así. De verdad, no logro acordarme. Desde entonces creo que he cambiado bastante. Ya no soy una niña, ahora soy un poco más madura, o eso intento. Y en estos años me han pasado muchas cosas, pero solo te contaré lo más importante, tampoco quiero aburrirte.
Sabes que siempre he sido la más bajita de mis amigas y, aunque eso hubo un tiempo en que me gustó, ahora lo aborrezco. La gente siempre ha tenido un motivo por el que podían insultarme si querían, aunque ahora ya he aprendido a pasar un poco de ese tema.
Con mis amigas, mi grupo ha cambiado notablemente. Tan solo conservo a una amiga de la infancia, el resto son ahora relaciones cordiales, más o menos. La verdad que en este último grupo, que por cierto tambien ha sufrido alguna que otra modificación, tal vez haya sido en el que peor situación me he encontrado por unos problemillas... Pero bueno, no me quejo, que eso me ha servido para aprender y descubrir mi amor hacia las letras. También provocó cosas malas para mi... Aunque agua pasada no mueve molinos, y esta ya tiene más de un año.
La familia está bien, yo se que mamá te hecha mucho de menos y seguro que se acuerda todos los días de ti, como hago yo. Bueno pero si hizo una sopa con tu nombre en un curso de cocina y todo. Creo que ella también está aprendiendo conmigo, no es fácil ser madre y yo reconozco que soy una hija un poquillo difícil. No de comportamiento, sino de lo introvertida que puedo llegar a ser aveces. Papa y mi hermana están bien, tan cabezotas como siempre, pero me gusta de vez en cuando las pequeñas discusiones que tenemos. Mi otra abuela ahora tiene un perro nuevo, es un mastín, y está muy grande y es un poco bruto aveces, pero se pone muy contento los domingos cuando voy a visitarle. El anterior murió, y estoy segura que no encontraré perro tan dócil como él.
Y en el amor... Ya sabes que eso nunca se me dió bien. He sido víctima del que considero mi primer gran amor, que por cierto ha sido a distancia. Una distancia de cuatrocientos kilómetros y, además, nunca nos hemos visto. La cosa no acabó muy bien pues el ahora ha decidido desaparecer de mi vida, así, derepente. Lo que más me fastidia de todo esto es que no he conseguido llorar por él todavía, pero bueno, creo que lo podré sobrellevar.
La verdad que me apena mucho el que ya no estés aquí para librarme de los castigos de mi madre, como esa vez que me obligó a estar en el sillón y tu me trajiste un libro para que leyera. No se porque, pero nunca se me olvidará ese día.
Bueno, creo que ya voy a dejarte, pues seguramente hayas visto todos los días mis quejas al subir al instituto y mis sonrisas hablando por el móvil, cuando las tenía. Espero tener noticias tuyas pronto. Te quiero. 04-02-15
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Albasilencio
precioso, tierno, hermoso. me ha entusiasmado, de veras.
un fuerte abrazo.
09/02/15 08:02
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Sonoridario
¿Sabes?...la mejor experiencia de esta vida es abrir el corazón y tener palabras para dar vida, tal y como tú haces. Vas dejando una estela de niña/mujer, que no esconde las razones del miedo, que escribe con la sencillez de quien sólo espera escribir. Se siente en tu carta que una pequeña biografía va llenando tu memoria de vida sentida, de cambios, de encuentros y desencuentros. Todo es un juego, pero que te dará una experiencia llena de lugares emocionales donde encontrarte a ti misma. Ha sido un placer leerte, casi como estar escuchándote...un momento, para mi, maravilloso. Muchas gracias por ofrecernos tanto de ti.
09/02/15 08:02
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Superandoloimposible
Gracias alba, me alegra mucho oír eso. Un gran beso.
11/02/15 03:02
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Superandoloimposible
Gracias a ti Sonoridario por este comentario, me ha emocionado y animado mucho, de verdad. Un besazo.
11/02/15 03:02
