Y de pronto te paras. Te sudan las manos. Extrañas tu aliento. Pitan tus oídos. Te agobias.
Inspiras, expiras. Te has tranquilizado. Vuelves a caminar.
Te paras. No estás bien. Quieres continuar, per...
¡Hola! Somos una comunidad de escritores aficionados. Nos reunimos aquí a mostrar y comentar nuestros textos. Descubrimos nuevas historias y nuevos amigos cada día. → Únete para participar