Nunca se lo dijo, no se atrevió en ningún momento a ser rechazado, o lo que es aún peor, a ser
feliz. Me refiero a Esteban, que no pudo decirle a Ann lo que sentía.
Y yo, acá sentado pienso, ¿por qu...
¡Hola! Somos una comunidad de escritores aficionados. Nos reunimos aquí a mostrar y comentar nuestros textos. Descubrimos nuevas historias y nuevos amigos cada día. → Únete para participar