Tu delicadeza,
Es obra del manantial,
En nuestra naturaleza
Tú me das paz,
Cuando yo quiero llorar,
Es tu olor,
Que me da suavidad
¿A quién no le gustan las rosas?
A mi piel le das suavi...
Cuando recibí un beso de otro corazón,
sentí la sangre arder,
inundando mi presente,
y un amor que no pude corresponder.
Confundido quedò mi alma,
no hubo rastro de querer,
sentía que no tenia...
Corto el ramo, como con la suficiente largura para formar parte de la palma de la mano. Rosas
apretadas. Capullos de olor. Colores entretejiendo una madeja de vida olfativa. Despacio, como solía
camin...
no me responde, por que guerra... Las lápidas abruman el cementerio con ángeles nuevos caídos, en la
esquina, Fadhil, postrado recoge la mano de su bebé, ¿Quien le devuelve la cabeza? No aparece. La
m...
Cuando Rosita recuperó el conocimiento, estuvo a punto de volverse loca. Se vio completamente
desnuda, en un cuartucho estrecho, tendida en una vieja hamaca de plástico. Todo se balanceaba a su
alrede...
El autor paseaba despacio, observando
su obra sobre la pared iluminada.
Cuatro rosas sobre un liezo, luego
nada.
Nada más hermoso que ese cuadro.
Rosas pintadas, sobre el lienzo blanco,
rosas im...
Por un momento llegué a pensar que soltarías una de tus palabras. Me miré buscando mi mejor gesto y
cuando volví ya no estabas.
Una manía la mía el decir adios antes de marcharme y sacar el paragua...
Su casa era grande, sombría y anticuada. Vivía con su esposa embalsamada y en su jardín guardaba la
sepultura de sus perros. También tenía un rosal, en el jardín, en un costado, cerca de la tumba de
V...
Dos rosas encarnaban una danza definida,
pintorescas al son de los cantos,
de los cantos el pajaro anida.
Tersos los petalos que adoptan la espina,
que depura la rosa bachata,
lo ...
Me encuentro varado y escondido en la inmensidad de los oscuros pensamientos, acotando los sentidos,
aguardándolos hacia una sublime caída, no encuentro salida, me siento impotente, molesto,
sangrante...
Mientras yo labraba, mi hija dormía, cual angelito en la mañana. Yo le dije: - ¡Levántate, dulce
niña, y escucha la sirenita cantar!-, pero ella, silenciándome, dijo que quien entonaba, cual
ruiseñor ...
Hoy se cumplían ya cien años y todavía no encontraba lo que juró jamás buscar, levanta su vista y se
encuentra con los ojos de una joven tan hermosos como no los había visto hace mucho tiempo.
Recurr...
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