-¿Por qué no late?
Sus ojos celestes como la mismísima agua del mar, me miraron asustados. Su sonrisa se desdibujo al
instante y sus ojos se llenaron de un negro intenso, apagando el celeste en ellos...
Entendamos que el amor no sabe de tiempo,
lo mueve a su antojo conforme nos acercamos.
Si no estamos juntos se mueve tan lento
y corre veloz cuando conversamos.
El amor desconoce la diferencia d...
¡Hola! Somos una comunidad de escritores aficionados. Nos reunimos aquí a mostrar y comentar nuestros textos. Descubrimos nuevas historias y nuevos amigos cada día. → Únete para participar