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Yo Nunca PedÍ Ser Rey

. "Si algo resulta absurdo a un sudamericano cuyos ancestros debieron pelear contra un rey para obtener su independencia es que existan reyes. Es cierto que la Historia de América, si por Historia entendemos los primeros registros escritos, registra más años de monarquía que de gobierno republicano. Reyes ingleses, franceses, portugueses, franceses, holandeses, daneses, pretendieron reemplazar a los emperadores aztecas o incaicos, o aún a los simples cacicazgos hereditarios.
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. "Pero la Revolución francesa no pasó inadvertida por estos pagos. Inclusive más de una corona colaboró para que una república surgiera donde reinaba una corona rival. Los reyes de Europa siempre contrajeron matrimonio entre sí, fueron una gran familia…con inacabables disputas familiares.
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. "Hubo reinos e imperios en América, amén del incaico, el maya, el azteca y otros menos conocidos. También Brasil fue imperio y también México. Y obviamente Patagonia. Pero eso de ser vasallos o súbditos de un lejano y difuso monarca trasatlántico o andar haciendo reverencias o doblando la cerviz frente a un igual por aquí no cuaja y no cuaja desde hace rato. Porque todos aquellos que llevamos alguna sangre europea tenemos muchas probabilidades matemáticas de ser descendientes de reyes europeos. Pero también de sus sirvientes. Por eso por aquí cantamos “ved el trono a la noble igualdad”.
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. "Y entonces es que para que un rey (o una reina, que para el caso es lo mismo) no se aposentara violentamente en este sagrado suelo que tanto reniega de testas coronadas hubo que coronar una, y corona la de mayor legitimidad y derecho, otorgada por la Madre Iglesia, administradora en la Tierra de la Creación de Dios.
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. "Y por la humildad, mansedumbre y obediencia debida por todo buen cristiano a la Madre Iglesia y su legítima jerarquía romana es que a este siervo de Dios correspondió dejar de lado convicciones republicanas y asumirse como rey en este antimonárquico hemisferio sur y como cabeza diseñar los matrimonios adecuados a esta naciente dinastía criolla. Pero no fue necesario, porque al parecer nuestro destino ya está escrito desde el principio de los tiempos, y no fue entonces necesario diseñar lo que ya había sido sabia y magistralmente diseñado y ejecutado de antemano por el Señor Dios."
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. Y así dijo don Astolfo al jurar y ser ungido en su casa de la Estancia San Juan, en Ayacucho, localidad de nombre emblemático de la Revolución americana, un 31 de mayo de 1996. Era invierno. Hacía frío.
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. Sor María Ceferina.
. Londres, 35 de febrero de 2056.
Ceferino01 de mayo de 2016

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