Cuando miro al cielo , buscando luz,
A veces me pierdo , me sumerjo en él,
Y cuando presiento, que no se que hacer ,
Busco la paz, me enfoco, surjes tú;
Entre nubes, estrellas, o el cielo azul,
Isofacto a mi mente llega el poder,
Para lograr imaginar, recorrer,
Mares de placer, sacados de un baúl .
Nutriendo así, un alma que fugaz se ahoga,
Cuando anhela y no tiene, cuando sufre,
Ante la ausencia de esa suave droga,
Que cuando la fumo, en mi ser produce,
Latires por mil que firmes derogan,
Aquello que la distancia introduce.