Quizás
No podía creer lo que estaba viendo, ¿habría visto bien?...no podía ser, estaban lejos, había tantos kilómetros
La última vez que se habían visto ella se estaba subiendo a un tren y él estaba en mitad del andén con la vista fija al sitio por donde ella había entrado. Era septiembre, las tres y veinticinco de un día lluvioso
La noche anterior todo había sido muy confuso, pensaba que él comprendería que la distancia es un impedimento que no lograrían superar, pero no fue así, el resto de la conversación había luchado por olvidarla, y creía que lo había conseguido
hasta ese momento.
Se acercó, no había duda, era él. Las facciones más marcadas, el pelo más corto, quizás algo más alto, pero seguía teniendo esa iniciativa que un día la había enamorado, la misma que le hizo levantarse y andar hasta ella, con decisión, mirándola a los ojos,
sin miedo.
- ¿A qué has venido?- Fue lo único que la salió, resultaba que le seguía teniendo rencor por esa última conversación, se arrepintió cuando él empezó a hablar
- No es evidente?- Esperó a que ella contestara, pero no lo hizo.-Dime que no me quieres y me iré por donde he venido, te juro que no te volveré a molestar más
solo dímelo.
Quiso decirlo, de verdad deseó ser capaz de decirlo
pero no pudo, bajó la cabeza y una lágrima resbaló por su mejilla. Él se acercó todavía más
eran las tres y veinticinco de un día lluvioso de septiembre, en otra ciudad, en otra vida
¿!El despertador¡?...se despertó con lágrimas en los ojos,,
Dali13 de junio de 2008
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Abyssos
Maldito despertador! siempre interrumpiendo en el mejor momento... psss ya que, jeje.
Es tu primer post aqui? BIENVENIDA! ;)
13/06/08 05:06
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Dali
sii gracias!=)
13/06/08 09:06
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Marisol
Opino lo mismo que Aby
me gusto mucho Dali.
besos y bendiciones.
17/06/08 05:06