¨Un sueño mágico en la mente de un soñador, es como una estrella en el infinito. Nace de la nada, ilumina el espíritu, y crea un mundo que todavía no existe¨ Diegozami.
Encerrados en mundos que pueden ser de nuestras creaciones, o influidos por otros mundos viajeros que pasan y se quedan, estos siempre pueden iluminar la vida entera, y más allá, también.
Hay niños que no logran crecer porque se quedan jugando en el patio del alma, y distraídos del mundo se alejan, despreocupados, crecen con un pie adentro, y otro afuera.
Aunque nos invadan sueños que no parezcan muy reales, el mundo siempre ha girado con ellos y sus increíbles historias. Los sueños no tienen edad, solo se alimentan del futuro, la fantástica curiosidad que puede llevarnos a mirar por el ojo del tiempo, un tiempo lleno emociones que no hace falta nunca tocar.
La mente puede parecer maravillosa, para bien o para mal, pero la enorme curiosidad que pueden alcanzar nuestras emociones y nuestros sentimientos, está más allá siempre de nuestra mente.
Me puedo arrepentir de muchas cosas del pasado, más nunca ve voy a arrepentir de haber soñado.
Aunque no sucedan en el mundo, os aseguro que seguiré soñando mágicamente en el mío, tomare mi arco, y lanzare flechas de luz hacia todo el universo.
Mientras tanto; seguiré con la misma sonrisa en mi alma, sabiendo que los sueños magicos existen.