Cuan labios besando el alma amada,
la pasión llena de palabras los mundos,
excelsas y rojas como la sangre,
las inhóspitas, han de marchitarse,
olvidadas por un tiempo sin pureza.

Manantial de luces fugaces,
tan verdes en gamas glamorosas,
fascinante premura altiva,
de amaneceres luminosos,
presuntuosos como la espuma blanca.

Un pasado que se aquieta,
un horizonte difuso se extingue detrás del universo,
todo se difumina en miles de colores,
alzando el calmo respirar,
no se escucha jamás al tiempo.

Plenitud, tú que bebes en silencio,
toda lágrima que nace del gozo,
llevadme al rincón de los labios nocturnos,
donde los pérfidos besos embrujados,
duermen los insomnios; de una pasión inmortal.

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3 Comentarios

• 

  Polaris

  Tu poesía por méritos propios se alza como una estrella en el cielo del universo de está página, aunque suene rimbombante no lo es, es una verdad excelsa.
  
  Me recuerdas a alguien muy cercano a mi.
  
  Te felicito.
  
  Pol.

  03/02/19 10:02

• 

  Diegozami

  Amigo Polaris. Tus palabras, ademas de estimularme, me hacen caer de rodillas... las guardaré cada una en el alma.
  
  Gracias...
  

  05/02/19 10:02

• 

  Diegozami

  Regina...gracias...gracias.
  
  Saludos gigantes.

  08/02/19 08:02