Miedote como se miedan
los miedos más miedibles.
Tanto es que te miedo
que miedando, miedando
miedando escribo.
Trémulo, tremulo
de tanto miedirte,
de tanto miedirte
hasta me susto,
y el susto que media
mi miedirte, porque aún te miedo,
me, me, me, même
¿miedirte o no...
Me tristo, no quiero
pero me tristo
y enllanto por miedirte,
porque me susta miedirte y
todo me dolo, me dolo por
tristarme, ¿por qué enllanto?
Todo se enllanta, el cielo enllanta.
Ellos también te miedan
y treman trémulos cuando
miedandote te ensientimen.
¿Y por qué te miedo?
¿Por qué mi no ser te mieda?
¿te mieda y tes capa?
Te miedo y tes pero,
trémulo, tremulo,
enllantando (el enllantar
que es reflejo de todo
dolo, lo que dola
miedir) sé que ellos
te ensientimen como
te ensientimo, como te miedo,
cómo no miedirte,
y indejando el miedir.
