Desde las noches vacías en las que te busco.
Con los amaneceres contigo en los que te encuentro.
Con tu boca que anuncia estaciones
y tu mano que regala lagrimales
Se que hay tres días en una sola tarde
y dos caras en una sola cara.
y conocen tus ojos claros el destello
de tu sonrisa abandonada en mi destino.
Conozco desde entonces el delirio
de perderme en tu cuerpo sin reparo
para volver siempre del olvido
a buscar en tu cama mis pedazos.
Y si después de aparecer dentro de ti
consiguiera yo encontrar errante el camino
y escuchar dentro de ti como suena
el silencio de quien sufre
me permitirías esta vez atrevidamente
pedirte que me dejes por la mañana
y que ahora y para siempre quede grabado
mi te quiero en esta esquina
Que es el rincón que me queda en el vacío.
Donde nadie pudo prohibirme
donde nadie puede negarme comunicarte si me quedo que
hoy
hoy
voy a quererte sin miedo
