TusTextos

Nostalgia

He pasado un tiempo tratando de entender el flujo de pensamientos que me invade, y creo que después de cavilarlo un rato, ha sido nostalgia.

He visto muestras fehacientes de mi pasado… no solamente escarbado en mi cerebro si no… acciones impresas en una piedra del tiempo. Dejemos las alegorías… Nosotros cambiamos, maduramos, nos moldeamos a través de las experiencias; a través de la interacción con nuestros semejantes y, nos quedamos siempre con algo y, dejamos también enseñanza inconsciente, positiva o negativa con quienes interactuamos.

Me he visto inocente, tierno, inmaduro, envuelto en el caparazón egocéntrico, protegido por el amor de mis padres; ignorante del valor de la empatía, egoísta; He visto el mundo girar en torno mío. He sido cruel, malvado e insensible con quien ha depositado siempre su cariño y amor en mí.

Me he visto amado por una mujer, en condiciones físicas y de salud inmejorables; He visto, que durante esos tiempos, proyectaba a mi alrededor un montón de buenas vibras, pensaba menos, actuaba más, era más libre y más inocente. Me intimidaban cosas más banas, temía ideas ahora inconcebibles o ridículas. Imaginaba tonterías que me divertían y me motivaban… ahora nimias, impensables, bobas.

He sufrido, he llorado, he vivido la muerte de un ser querido; un verdadero infierno, un lastre nostálgico perpetuo e invalidante. Una constante autoflagelación; cuya única resolución es el incesante, el indetenible paso del tiempo.
He reído, he disfrutado enormemente mi vida, la he sentido hacer vibrar cada una de mis fibras. Me he reído a carcajadas, hasta llorar de la felicidad. Me he embriagado de alegría, en más de un momento, con más de una persona. He sido querido y respetado. Pero también he sido repudiado.
He visto como cambia la gente alrededor mío; en la misma medida en que yo lo hago. Cuando surge una inflexión, o deflexión en el continuo palpitar de mi vida, en esa misma magnitud, sin importar la escala de medición, el continuo de mi amada gente se inflexiona o deflexiona en el mismo sentido.
He creído en Dios. He sido agnóstico, panteísta y ateo.
las cosas más hermosas… las que me hacían vibrar, ahora las veo nimias, desabridas.
Pero he crecido en otros aspectos. No me asusto, conozco a la perfección que soy una ínfima entidad más en este incesante vehículo de tiempo y universo, un ser indivisible pero minúsculo y despreciable: como un grano de arena de hace siete siglos. Soy finito en individualidad y formo parte de una masa heterogénea de materia infinita. Tengo la certeza que la penumbra me aguarda en cuanto mi corazón detenga su perentorio galope.

Comprendo que todos pasamos por una transformación constante llamada edad cronológica. Y comprendo el valor de cada uno.
Se de antemano que en alguna parte del córtex, debido y gracias a la evolución. Existen sustancias que atraviesan circuitos labrados por los años en la historia milenaria de nuestro genoma, y que aún existen muchos otros ignotos; son los que rigen esas sensaciones a veces indescriptibles; aquella materia prima que han tratado de diseccionar grandes sabios a través del tiempo.

Esa amalgama de felicidad y desdicha que ha acompañado a este humilde narrador, no es más que una mezcla de neurotransmisores convenientemente emitida al estímulo adecuado en el siempre cambiante complejo neuronal de un joven YO; o de un viejo YO.

Antes de pretender juzgarme de nihilista, sépase que comprendo que el motor principal de todo cuanto vale la pena sacrificarse y vivir: es el amor. No hablo del primer piso de waslow; no hablo del deseo, de las sustancias cerebrales agotables ni los estímulos eléctricos, ni del jodido simpático vertiendo sangre en los cuerpos cavernosos ante la mirada de una belleza mediterránea. Hablo del amor como un camino, un proyecto, una causa infinita…

Todos queremos viajar por él… lo que nos pueda dejar papi Cronos, independientemente de cualquier adversidad.

Por ultimo. Espero mirar este escrito en unos años, luego de haber terminado proyectos de mi vida, y tratar de leerlo sin que me inspire esta desdicha; que no me genere los mismo estímulos en el laberinto neuronal de mi psique.

Que no me inspire Nostalgia.
Hellraiser08 de octubre de 2013

3 Comentarios

  • Sinchan

    Creo que un escrito como éste es muy difícil que no genere nostalgia. Nostalgia por lo que hemos vivido, aunque no debería ser puesto que lo hemos disfrutado y sufrido a la vez. Aun así, conseguirlo sería un gran logro puesto que eso significaría que, el estado actual, es mucho mejor que el del pasado.

    Un beso
    Lis

    08/10/13 03:10

  • Hellraiser

    Si... es nostálgico porque... creo denoto lo efímero y sin importancia que es nuestro paso en este mundo, y lo frío que funciona esa nuestra compleja máquina de sentimientos.
    Además recordar tiempos sosos pero felices... joder que nostalgia...
    Espero que en algunos años que esté más maduro, encuentre júbilo en las cosas más simples... como antes.

    SINCHAN gracias por tu comentario... liberaste un poco de serotonina y me dibujaste una sonrisa jajajaaj. Por cierto.. es el piso de Maslow, hace alusión a su pirámide... creo que estaba medio dormido jaja

    besos

    08/10/13 07:10

  • Sinchan

    Jajaja, no importa, si yo te contara la de veces que tengo un despiste y las que voy liando por ahí! Por cierto, me llaman Dori... Dori, la que habla balleno... ;)

    Y yo espero que no estés más maduro para disfrutar de las cosas simples porque son las que más satisfacciones te van a dar. Te lo aseguro!

    Un beso
    Lis

    09/10/13 07:10

Más de Hellraiser

Chat