-Él. Él. Todo empezó por culpa de ese maldito chico- Aún me cuesta recordar cómo pasó todo. Me cuesta sacar los acontecimientos de mi cabeza. Aquella noche estuvo llena de emociones, de sensaciones. Demasiadas cosas se metieron en mi cabeza.

-Apareció de repente, de entre la oscuridad- continúo. No tenía ni idea de quien era. Simplemente, entre sorbo y sorbo, le vi. Aquella cara. Aquellos ojos que se veían gracias a la luz de la luna. Unos ojos claros. Azules, grises quizá. Se iba acercando. Empecé a distinguir su pelo, un pelo rubio, también iluminado gracias a la luna. Un pelo a media melena con un flequillo que le llegaba hasta las cejas.

-¿Y qué pasó luego, señorita Robles?-No me esperaba ninguna pregunta, yo sólo estaba explicándoselo todo, de un tirón. Supongo que será un tema de profesionalidad, o simplemente se sentía apartado de la conversación, en este caso, monólogo.

-Al parecer, ese chico, era un amigo reciente de Fernando, el cumpleañero. Se conocieron en el entrenamiento de Fernando, un par de días antes, y le invitaron a la fiesta. Se acercó al grupo y, muy amablemente, empezó a saludarnos a todos. A las chicas se les acercaba para darle un par de besos en las mejillas. A los chicos, en cambio, un simple apretón de manos. No paró de decir que estaba encantado con todo el mundo.

-Parece que es un chico majo. ¿Te cayó bien ya desde el principio?- Volvió a interrumpirme de repente el psicólogo.

-La verdad es que sí. Era muy simpático y amable con todos. Aún no sé si era fingido para que lo aceptaran o si era realmente así. Yo fui la última a quien saludó, por simple cuestión de cómo estábamos sentados. Se me acercó lentamente, me acarició suavemente el pelo, y me dio un beso lento y cálido en la mejilla. Seguidamente me dirigió unas palabras:

-Buenas noches preciosa…- Me ruboricé al acto. No entendía absolutamente nada. ¿Acaso me conocía de algo?

Seguir AutorRecomendar Texto Agregar a Favoritos